AI: El régimen sirio extorsiona a familiares de desaparecidos que buscan información

4/11/2015 | Miguel Máiquez
Imagen de la portada del informe
Imagen de la portada del informe ‘Entre la cárcel y la tumba. Desapariciones forzadas en Siria’. Foto original: Mark Esplin / Amnistía Internacional

Amnistía Internacional (AI) ha hecho público este jueves un informe en el que denuncia que el Gobierno sirio extorsiona de manera «despiadada» a familiares de desaparecidos forzados para que paguen por obtener información. Según la ONG, el régimen se está beneficiando, a través de un auténtico «mercado negro», de hechos que suponen «crímenes contra la humanidad».

El informe, titulado Entre la cárcel y la tumba. Desapariciones forzadas en Siria, expone, según señala AI, «la enorme escala y la naturaleza escalofriantemente orquestada de decenas de miles de desapariciones forzadas, llevadas a cabo por el Gobierno sirio a lo largo de los últimos cuatro años».

Oficiales del Estado sirio, continúa la ONG, «se están beneficiando económicamente de desapariciones forzadas generalizadas y sistemáticas, que constituyen crímenes contra la humanidad, mediante un insidioso mercado negro en el que familiares desesperados por averiguar el destino de sus parientes desaparecidos son explotados sin piedad a cambio de dinero».

El informe «describe con desgarrador detalle la devastación y el trauma que sufren las familias de decenas de miles de personas que se han desvanecido sin dejar rastro en Siria, y su cruel explotación para conseguir beneficios económicos», añade AI.

En el documento se incluyen testimonios de activistas de derechos humanos que aseguran que los sobornos se han convertido en «una parte importante de la economía» del país. También recoge las declaraciones de un abogado de Damasco que asegura que los sobornos son «una vaca lechera de efectivo para el régimen […], una fuente de financiación de la que [el Gobierno] ha llegado a depender».

65.000 desapariciones

La Red Siria de Derechos Humanos ha documentado al menos 65.000 desapariciones desde 2011, de las cuales 58.000 son de civiles. Amnistía explica que, por lo general, estas personas se encuentran «en celdas abarrotadas, en terribles condiciones y aisladas del mundo exterior». «Muchas mueren como consecuencia de enfermedades, torturas (descargas eléctricas, azotes, violaciones) y ejecuciones extrajudiciales», añade la ONG.

«No salí de mi celda durante tres años enteros, ni una sola vez… Muchos se volvían locos», relata Salam Othman, uno de los desaparecidos forzados (entre 2011 y 2014), citados en el informe.

Entre los desaparecidos se encuentran, según denuncia AI, oponentes pacíficos al régimen, tales como manifestantes, activistas de derechos humanos, periodistas, médicos o trabajadores humanitarios. Otros han sido colocados en el punto de mira debido a que algún familiar está incluido en la lista de buscados por el Gobierno.

Los familiares que intentan obtener información sobre sus parientes desaparecidos por medio de vías oficiales, suelen ponerse en riesgo de ‘desaparecer’ ellos mismos (Amnistía documenta varios casos en este sentido), por lo que a menudo no les queda otro recurso que acudir a «intermediarios», cuyas «tarifas» oscilan entre cientos y decenas de miles de dólares.

El informe deja constancia de «la desesperación e incluso el sufrimiento físico» que experimentan los familiares y amigos tras una desaparición forzada: «Saeed, cuyo hermano Yusef desapareció por la fuerza en 2012, asegura que su madre no para de llorar. «A veces me despierto en mitad de la noche y ella está levantada, mirando su foto y llorando», asegura».


Más información y fuentes:
» Syria: State profits from crimes against humanity as policy of enforced disappearances drives black market (Amnesty International)
» Without a trace: enforced disappearances in Syria (UN Human Rights Council, 2013)
» El dramático destino de los desaparecidos en Siria (BBC)