Israel bombardea otra escuela de la ONU en Gaza «Anoche murieron niños cuando dormían junto a sus padres en el suelo de un aula, en un refugio de la ONU en Gaza. Niños muertos mientras dormían. Es una afrenta para todos… Leer
«Anoche murieron niños cuando dormían junto a sus padres en el suelo de un aula, en un refugio de la ONU en Gaza. Niños muertos mientras dormían. Es una afrenta para todos nosotros, una vergüenza universal».
Así comienza el duro comunicado hecho público este miércoles por Pierre Krähenbühl, comisionado general de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA), después de que al menos 19 civiles murieran y otros 90 resultaran heridos en un nuevo ataque del ejército israelí contra una escuela de esta organización en Gaza.
El ataque, que se produjo de madrugada, alcanzó de lleno la escuela Abu Al Hussein, en el campamento de refugiados de Yabalia, donde impactaron varios proyectiles de artillería. Médicos citados por la agencia palestina de noticias Maan aseguraron que la mayoría de las víctimas son niños y mujeres que se habían refugiado en las instalaciones de la agencia de la ONU. La escuela acoge a familias enteras que han tenido que evacuar sus casas en la zona por los bombardeos israelíes de las últimas tres semanas.
El ejército israelí dijo «no tener constancia» del ataque, si bien reconoció que decenas de blancos en Gaza habían sido bombardeados durante la madrugada.
Embed from Getty ImagesUn niño palestino, en las ruinas de la la escuela Abu Al Hussein, en el campamento de refugiados de Yabalia, en Gaza, tras el ataque israelí. Foto: Mustafa Hassona / Anadolu Agency / Getty Images
Horas después, y a pesar de que las fuerzas israelíes habían anunciado una tregua humanitaria, se reanudaron los bombardeos. Esta vez alcanzaron, entre otros lugares, el principal mercado de la franja, situado en el barrio de Shajaiya. Estaba lleno de gente. Al menos 17 personas murieron y un centenar resultaron heridas por los disparos de artillería.
Los testigos afirman que los tanques siguieron disparando, pese a que en el lugar había miembros de los equipos médicos y periodistas. Entre los muertos hay un reportero palestino y un paramédico.
Este es el comunicado completo del comisionado general de la UNRWA:
Anoche murieron niños cuando dormían junto a sus padres en el suelo de un aula, en un refugio de la ONU en Gaza. Niños muertos mientras dormían. Es una afrenta para todos nosotros, una vergüenza universal. Hoy el mundo está en desgracia.
Hemos visitado el lugar y hemos reunido pruebas. Hemos analizado fragmentos, examinado los cráteres y otros daños. Nuestra valoración inicial es que fue la artillería israelí quien atacó nuestra escuela, un lugar en el que habían buscado refugio 3.300 personas. Creemos que se produjeron al menos tres impactos. Aún es muy pronto para dar una cifra confirmada de muertes, pero sabemos que ha habido muchos civiles muertos y heridos, incluidos mujeres, niños y el vigilante de la UNRWA que intentaba proteger el lugar. El ejército israelí había ordenado a estas personas que abandonasen sus casas.
Tanto la localización exacta de la Escuela Elemental de Niñas de Yabalia, como el hecho de que acogía a miles de desplazados internos, había sido comunicado al ejército israelí en 17 ocasiones, con el fin de asegurar su protección. La última fue a las nueve menos diez de la noche pasada, solo unas horas antes del fatal bombardeo.
Condeno en los más duros términos posibles esta grave violación del derecho internacional por parte de las fuerzas israelíes.
Esta es la sexta vez que es atacada una de nuestras escuelas. Nuestro personal, las personas que dirigen la respuesta humanitaria, está muriendo. Nuestros refugios están desbordados. Si continúan estos ataques, decenas de miles de personas pueden quedarse pronto en las calles de Gaza, sin comida, agua ni refugio.
Ya no podemos limitarnos a la acción humanitaria; es hora de exigir responsabilidades. Hago un llamamiento a la comunidad internacional para que tome medidas políticas que pongan fin de inmediato a esta constante carnicería.
Amnistía Internacional también ha condenado con firmeza el ataque a la escuela de la ONU:
[…] «Si los disparos han procedido de la artillería israelí, se trataría de un ataque indiscriminado y, probablemente, de un crimen de guerra. La artillería no debería utilizarse nunca contra blancos situados en áreas civiles llenas de gente, y su empleo en esas circunstancias nunca puede ser considerado como un ‘ataque quirúrgico’», dijo Philip Luther, director de Amnistía Internacional en Oriente Medio y el Norte de África.
«La cifra de muertes continúa creciendo a un ritmo alarmante, e Israel tiene la obligación de tomar todas las precauciones factibles para proteger a los civiles. Es terrible que civiles que siguieron los avisos israelíes para que abandonaran sus casas hayan muerto o hayan resultado heridos durante la noche en el teórico santuario de una escuela de Naciones Unidas», añadió.
El empleo repetido de artillería contra zonas densamente pobladas provoca que, inevitablemente, mueran y resulten heridos civiles, y causa asimismo la destrucción de edificios civiles, sea cual sea el objetivo previsto. Las fuerzas israelíes ya han usado estas tácticas temerarias anteriormente, como en la operación Plomo fundido, entre 2008 y 2009, cuando murieron unos 1400 palestinos, la mayoría de ellos, civiles. […]
De acuerdo con los últimos datos aportados por el Ministerio de Sanidad de Gaza, un total de 93 personas han muerto en la franja durante la jornada de hoy, la mayoría civiles. El número de víctimas desde el inicio de la campaña israelí asciende ya a 1.327 muertos y más de 7.000 los heridos.
Israel bombardea otra escuela de la ONU en Gaza «Anoche murieron niños cuando dormían junto a sus padres en el suelo de un aula, en un refugio de la ONU en Gaza. Niños muertos mientras dormían. Es una afrenta para todos… Leer
Un obús (tal vez varios) impactó este jueves en una de las escuelas de Gaza que administra la UNRWA (la agencia de Naciones Unidas que asiste a los refugiados palestinos), causando al menos 15 muertos y unos 200 heridos. Muchas de las víctimas son niños y mujeres civiles. También han muerto trabajadores de la ONU. La escuela, situada en Beit Hanun, al norte de la franja, era utilizada como refugio por muchas familias palestinas que han tenido que abandonar sus hogares en las últimas semanas debido al ataque israelí. En un contexto donde la cifra de muertos desde que se inició la operación militar contra Gaza se acerca ya a las 800 personas (el 20%, niños), donde miles de familias lo han perdido todo y no saben ya ni a dónde huir, las imágenes de hoy son especialmente difíciles de digerir.
Embed from Getty ImagesHeridos en el ataque a una escuela de la UNRWA en Beit Hanun, Gaza. Foto: Majdi Fathi / NurPhoto / Getty Images
Las autoridades palestinas en la franja han culpado desde el principio a un tanque israelí. Naciones Unidas ha indicado que no puede determinar aún la fuente de los disparos. Israel, hasta el momento, no ha confirmado ni desmentido nada oficialmente, pero nada más conocerse el suceso se apresuró a sugerir que la escuela había sido alcanzada por un cohete de Hamás cuya trayectoria se habría quedado corta (Beit Hanun está muy cerca de la frontera con Israel, en el norte de la franja). El comandante de la división que entró en Gaza hace siete días, Michael Edelestein, reconocío que todavía no estaban seguros de lo que había ocurrido, pero añadió que «nunca bombardearíamos un sitio así».
Sin embargo, a última hora de la tarde, el ejército israelí daba pistas en Twitter de que es más que probable que el ataque haya procedido de uno de sus tanques, aunque indique que habría sido «en respuesta» a disparos de Hamás:
La serie completa de tuits dice así: «En los últimos días, Hamás ha disparado cohetes desde el área de Beit Hanun donde está situado el refugio de la UNRWA. Anoche le dijimos a la Cruz Roja que evacuase a los civiles del refugio entre las 10 am y las 2 pm. La UNRWA y la Cruz Roja recibieron el mensaje. Hamás impidió que los civiles fuesen evacuados durante el tiempo que les dimos. Hoy, Hamás ha continuado disparando desde Beit Hanun. El IDF [ejército israelí] respondió apuntando al lugar de donde procedían los disparos».
Este comunicado se contradice, en cualquier caso, con la versión del intento de evacuación dada por la ONU. Según la UNRWA, «el Ejército de Israel había recibido las coordenadas exactas de la localización del refugio» para evitar su bombardeo y, a lo largo del día, la agencia de la ONU había intentado, sin éxito, acordar con los militares una forma en que los civiles pudieran evacuar el centro, situado en una zona cada vez más peligrosa, a medida que se iban acercando los combates:
Los refugiados no recibieron aviso alguno de que el edificio iba a ser atacado de forma inminente. Uno de los proyectiles estalló en el patio central, lleno de gente en esos momentos. La escuela y la zona colindante fue alcanzada, al parecer, por varios obuses.
«El patio de la escuela quedó cubierto de charcos de sangre y libros diseminados. Había una gran quemadura en el suelo, en el lugar donde estalló el proyectil», contaba un testigo a la agencia AP. En el hospital Kamal Adwan, donde fueron trasladados algunos de los heridos, un sobreviviente decía a un periodista de Al Jazeera: «Estábamos en la escuela porque nos habían dicho que era un lugar seguro. Allí no había un solo combatiente, ningún disparo salió de allí. ¿Por qué disparan a una escuela? ¿Por qué? ¿Puede alguien explicármelo? ¿Puede alguien explicarme esto? ¿Qué culpa tiene una escuela?».
El colegio bombardeado es uno de los cerca de 100 centros que la ONU ha habilitado como refugio para los más de 100.000 desplazados por la operación militar israelí en Gaza. Acogía a alrededor de un millar de personas. La ONU había decidido vaciar la escuela por los duros bombardeos israelíes, por tierra y aire, de los últimos días.
Israel ha acusado reiteradamente a Hamás de utilizar algunas de estas escuelas operadas por la ONU como lugar de lanzamiento de cohetes, algo que la UNRWA niega. Lo que sí ha admitido, y condenado, la UNRWA es haber encontrado cohetes en algunas de sus escuelas vacías.
El de hoy no es el primer ataque que sufre una instalación de la ONU en Gaza desde que comenzó la ofensiva terrestre israelí. El lunes fue alcanzada una escuela en la que se refugiaban cerca de 300 personas, y el martes por la mañana, otra en Dair Al Balah donde hay acogidos 1.500 refugiados. En este último ataque se registraron al menos cinco heridos.
Miles de personas (unas 10.000, según la agencia palestina Maan) se manifestaron este jueves por la noche en Ramala, Cisjordania, contra la intervención israelí en Gaza. Los manifestantes, convocados a través de las redes sociales, partieron del campo de refugiados de Al Amari en dirección al paso de Qalandia, tomado por las fuerzas israelíes. La protesta derivó en enfrentamientos con soldados israelíes, quienes utilizaron fuego real, pelotas de goma y gases lacrimógenos para tratar de dispersar a los palestinos. Los choques han dejado al menos dos muertos y más de un centenar de heridos, de los cuales unos 60 presentaban heridas de bala.
Más información y fuentes:
» Shelling of Gaza school kills at least 15; toll nears 800 (Reuters)
» Gaza: How Many More Deaths Will It Take? (The New Yorker)
» Blasts Kill 16 Seeking Haven at Gaza School (The New York Times)
» Israeli strike on Gaza school kills 15 and leaves 200 wounded (The Guardian)
» Matanza en un centro de la ONU en Gaza (El País)
» Un ataque sobre una escuela de la ONU en Gaza causa al menos 17 muertos y 200 heridos (RTVE)
» UN school in Gaza caught in cross-fire; 15 killed (AP)
» Al menos 17 muertos en bombardeo israelí a escuela de la ONU (Efe)
Y aquí, una lista de periodistas informando en Twitter desde Gaza.
Un obús (tal vez varios) impactó este jueves en una de las escuelas de Gaza que administra la UNRWA (la agencia de Naciones Unidas que asiste a los refugiados palestinos), causando al menos 15 muertos y unos 200 heridos. Muchas… Leer
Refugiados palestinos llegando a Jordania en 1968. Foto: G. Nehmeh (United Nations Relief and Works Agency).
Millones de niños (y de padres) en todo el mundo se preparan esta semana para la vuelta al colegio tras las vacaciones de verano. Las familas afrontan como pueden los nuevos gastos (material escolar, ropa), ajustan sus horarios… Todo dentro de una rutina hasta cierto punto previsible, y con unos problemas que, salvo excepciones, forman parte del discurrir normal de la vida. Al menos, esa es la imagen en el mundo desarrollado, que no es, en absoluto, la mayoría del mundo. Porque otros millones de niños (más de 70 millones, según las últimas cifras de la Unesco) permanecen sin escolarizar en todo el planeta, y porque las condiciones en que tienen que ir a la escuela muchos de los que sí pueden hacerlo son tan lamentables que, en comparación, el peor de nuestros colegios, con o sin crisis, parecería un centro de auténtico lujo.
Esta semana, medio millón de niños y adolescentes refugiados palestinos preparan también sus mochilas y sus libros para empezar el curso en las 700 escuelas de educación primaria y secundaria que tiene habilitadas la UNRWA (Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina, por sus siglas en inglés) en Gaza, Cisjordania, Líbano, Siria y Jordania.
La parte positiva, el hecho mismo de que puedan ir a clase, y el esfuerzo continuo que hace el personal de la ONU (muchos de ellos, palestinos trabajando sobre el terreno) para mantener en funcionamiento estos centros en unas condiciones tan difíciles.
En 2007, por ejemplo, la UNRWA introdujo en Gaza el proyecto denominado «escuelas de excelencia», que incluye programas de educación compensatoria, con un enfoque en las materias fundamentales, más contacto entre alumnos y profesores y atención primordial a las necesidades básicas de los niños. Y desde 2008, todos los estudiantes de las escuelas de Gaza gestionadas por la UNRWA han participado en actividades relacionadas con los derechos humanos, la resolución de conflictos y la tolerancia.
Nada de esto, sin embargo, es suficiente para compensar la otra parte, la parte negativa, la dura realidad en la que viven (y llevan viviendo durante varias generaciones) estos niños, una realidad que ha resumido la propia UNRWA, país por país, en un informe publicado hace un par de días.
En la Franja de Gaza, por ejemplo, la UNRWA dispone de 247 escuelas, con un total de 226.500 alumnos. En el 93% de estos centros se trabaja en jornadas dobles para poder atender a todos los niños, lo que impide tener horarios normales o desarrollar actividades extra académicas. En 167 de estas escuelas, más del 30% de los estudiantes pertenecen a familias que viven en pobreza extrema (incapaces de cubrir sus necesidades básicas diarias), lo que hace casi imposible que los niños puedan terminar sus estudios (son necesarios para intentar llevar dinero a casa). En los territorios palestinos ocupados (Gaza y Cisjordania) la tasa de desempleo superó en 2011 el 50%.
La UNRWA denuncia, además, que el actual bloqueo impuesto por Israel está afectando también a los escolares, y cita un informe de la Unesco del año pasado, según el cual el 80% de los niños de Gaza están nerviosos, tienen miedo o se sienten tristes la mayoría del tiempo.
Eso sin contar los frecuentes cortes de electricidad en la Franja, que hacen muy difícil la simple tarea de estudiar o hacer los deberes una vez que se pone el sol, especialmente en invierno, cuando hay menos horas de luz.
En Cisjordania, al problema de la crisis económica y los pocos recursos de las familias se suma otro mucho más tangible: el muro de separación construido por Israel. La UNRWA señala que, a causa de esta barrera, los niños y jóvenes que viven en la zona situada entre el muro y la llamada Línea Verde, es decir, el 10% de toda Cisjordania, tienen frecuentes problemas para poder acceder a sus colegios.
Además, la política israelí de demolición de casas y otras infraestructuras palestinas está teniendo, en palabras de la agencia de la ONU, «un impacto devastador en los niños», muchos de los cuales muestran síntomas de estrés post traumático, depresión y ansiedad, todo lo cual se refleja, obviamente, en sus resultados académicos.
Desde 2008, Israel impide a los jóvenes de Gaza ir a estudiar a las universidades de Cisjordania, argumentando razones de seguridad.
El informe, incluyendo también la situación en Siria, Jordania y Líbano, puede leerse (en inglés), aquí.
Millones de niños (y de padres) en todo el mundo se preparan esta semana para la vuelta al colegio tras las vacaciones de verano. Las familas afrontan como pueden los nuevos gastos (material escolar, ropa), ajustan sus horarios… Todo dentro… Leer