Cisjordania

Soldados israelíes inspeccionan las mochilas de escolares en Tel Rumeida, Hebrón (Cisjordania), en 2012. Foto: Friends123 / Wikimedia Commons

«Hay motivos razonables para concluir que la actual ocupación israelí del territorio palestino es ilegal según el derecho internacional, debido a su permanencia y a las acciones emprendidas por Israel para anexionar partes del territorio, tanto de facto como de jure. Las acciones de Israel que tienen por objeto crear hechos irreversibles sobre el terreno y ampliar su control sobre el territorio son tanto reflejos como impulsores de su ocupación permanente».

Así encabeza las conclusiones de su primer informe la Comisión Internacional Independiente de Investigación de Naciones Unidas sobre el Territorio Palestino Ocupado, incluida Jerusalén Oriental, e Israel1. «Al seguir ocupando el territorio palestino por la fuerza, Israel incurre en responsabilidades internacionales y sigue violando los derechos de los palestinos, individualmente y como pueblo», añade la Comisión, uno de cuyos objetivos es hacer llegar la situación a la Corte Internacional de Justicia.

El informe, presentado este jueves, recuerda que, según el derecho internacional humanitario, la ocupación de territorio en tiempo de guerra es una situación temporal y no priva a la potencia ocupada de su condición de Estado ni de su soberanía.

En una comparecencia ante los medios este mismo jueves, la presidenta de la Comisión, Navi Pillay, antigua Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, fue más allá y aseguró que «declaraciones recientes del secretario general [de la ONU, António Guterres] y de numerosos Estados miembros han indicado claramente que cualquier intento de anexión unilateral del territorio de un Estado por otro Estado es una violación del derecho internacional y es nulo y sin efecto».

«La semana pasada, 143 Estados miembros, incluido Israel, votaron a favor de una resolución de la Asamblea General que reafirma esto», añadió Pillay, en referencia a la votación del pasado 12 septiembre en la que la Asamblea General rechazó la anexión por parte de Rusia de cuatro territorios ucranianos, con solo cinco votos en contra —Corea del Norte, Siria, Nicaragua, Bielorrusia y la propia Rusia—. Pillay agregó que para que este principio fundamental de la Carta de la ONU «tenga sentido», debe «aplicarse universalmente», incluyendo en el caso del territorios palestino ocupado.

Asegurarse un «control permanente»

En el informe, de 28 páginas, la Comisión revisa políticas y acciones empleadas por Israel para mantener la ocupación y anexionarse partes del territorio palestino ocupado. Entre esas acciones, el documento destaca que Israel ha sostenido y hecho avanzar su «empresa de asentamientos», e incluye declaraciones de funcionarios israelíes que reafirman la intención de mantener un control permanente sobre el territorio, en violación del derecho internacional.

«Al ignorar el derecho internacional, estableciendo o facilitando el establecimiento de asentamientos, y al transferir directa o indirectamente a civiles israelíes a estos asentamientos, los sucesivos gobiernos de Israel han establecido hechos sobre el terreno para garantizar el control permanente de Israel en Cisjordania», afirmó Pillay.

Según el informe, Israel continúa violando los derechos de los palestinos, tanto individualmente como en conjunto, ya que expropia tierras y recursos naturales, unas acciones que requieren confiscación, demolición y desplazamiento de los residentes.

«Hay mucho daño silencioso y trauma psicológico, que puede no ser evidente de inmediato, como resultado de la erosión de los derechos económicos, sociales y culturales», advierte el Comisionado Miloon Kothari, en declaraciones recogidas en la web de noticias de la ONU. «Estos procesos debilitantes tienen graves consecuencias a corto y largo plazo y deben abordarse con urgencia», agrega.

Impacto en los niños

La Comisión ha analizado los impactos de las políticas de ocupación y anexión específicamente en las mujeres y los niños. Con respecto a estos últimos, indica que «el ambiente coercitivo tiene un impacto especialmente severo en los niños palestinos, quienes experimentan una presencia militar constante, frecuentes enfrentamientos y actos de violencia, restricciones de movimiento y demolición de viviendas y destrucción de infraestructura y propiedades».

«Desde principios de 2022, un total de 20 niños han sido asesinados en Cisjordania y actualmente hay 56 órdenes de demolición pendientes contra escuelas en Cisjordania, incluida Jerusalén Este. Desde 1967, miles de niños han sido desplazados y trasladados a la fuerza como resultado de la demolición de 28.000 viviendas palestinas», añade.

El informe destaca además que este «ambiente coercitivo» que obliga a los palestinos a abandonar sus hogares «ha fragmentado a la sociedad palestina y obstaculizado el derecho a la autodeterminación».

Con respecto al uso de la tierra, el informe señala: «La tierra es un recurso natural clave, parte integral de la identidad y la economía palestinas. Actualmente, los palestinos pueden construir en menos del 1 por ciento de la tierra en el Área C77 debido a las políticas de planificación israelíes y a la expropiación de más de 2 millones de dunams [unas 200.000 hectáreas] de tierra por parte de Israel desde 1967. Israel ha expropiado tierras en Cisjordania por una variedad de de fines, incluidos la construcción de asentamientos, zonas industriales, tierras agrícolas y de pastoreo para colonos y carreteras, en contravención del derecho internacional».

«Crimen de guerra»

En el apartado dedicado a las consecuencias de la ocupación en lo referente a los derechos humanos, el informe detalla que «Israel ha creado y mantiene un entorno complejo de coerción, que incluye la demolición de viviendas y la destrucción de bienes, el uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad, el encarcelamiento masivo, la violencia de los colonos, la circulación restringida a través de puestos de control y en carreteras, y limitaciones en el acceso a medios de subsistencia, necesidades básicas, servicios y asistencia humanitaria».

El informe concluye diciendo que algunas de las políticas y acciones del gobierno israelí pueden constituir «elementos» de crímenes bajo el derecho penal internacional, incluido «el crimen de guerra» de transferir parte de su propia población civil al territorio ocupado.

«Las acciones de los gobiernos israelíes revisadas en nuestro informe constituyen un régimen ilegal de ocupación y anexión que debe abordarse», señala Chris Sidoti, otro de los comisionados, en declaraciones recogidas asimismo en la web de noticias de la ONU.

Sidoti agrega que el sistema internacional y los Estados individuales deben actuar y cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional. «Eso debe comenzar en esta sesión de la Asamblea General con una remisión a la Corte Internacional de Justicia», recalca.

«Antisemitismo»

La misión diplomática de Israel ante Naciones Unidas criticó rápidamente el informe este mismo jueves, denunciando que el documento no menciona el «conflicto de mayo de 2021», a Hamás, o «actos de terrorismo». (El informe se enmarca en la investigación independiente abierta para dilucidar si Israel cometió abusos de los derechos humanos en Cisjordania y la Franja de Gaza tras los once días de guerra entre Israel y Hamás en mayo de 2021).

La misión israelí aludió también los «comentarios flagrantemente antisemitas de un miembro de la Comisión», en referencia a las declaraciones de Kothari, según informa AP. «Los comisionados que hicieron comentarios antisemitas y que se involucraron de manera proactiva en el activismo contra Israel, tanto antes como después de su nombramiento, no tienen legitimidad ni credibilidad para abordar el tema en cuestión», dijo la misión israelí en un comunicado. «Son parte de la agenda antiisraelí que lamentablemente todavía existe en las Naciones Unidas», añadió.

Por su parte, el primer ministro de Israel, Yair Lapid, calificó también este viernes como «antisemita» el informe. «Precisamente porque yo no era primer ministro cuando se llevó a cabo la operación ‘Guardián de las Murallas’ me siento obligado a enfatizar que el informe de la ONU es parcial, falso y flagrantemente subjetivo», señaló Lapid en un mensaje en Twitter recogido por Europa Press. «No todas las críticas contra Israel incurren en el antisemitismo, pero este informe sí ha sido escrito por antisemitas», añadió.


¹ La Comisión Internacional Independiente de Investigación de Naciones Unidas sobre el Territorio Palestino Ocupado, incluida Jerusalén Oriental, e Israel recibe su mandato del Consejo de Derechos Humanos de la ONU. Los comisionados no son personal de la ONU y no se les paga por su trabajo.

Más información y fuentes:
» Report of the Independent International Commission of Inquiry on the Occupied Palestinian Territory, including East Jerusalem, and Israel
» La ocupación israelí de los territorios palestinos es ilegal, determina la Comisión de Investigación (ONU)
» UN experts decry Israeli occupation of Palestinian areas (AP)
» La ONU determina que la ocupación israelí en territorio palestino es ilegal (Europa Press)

Una comisión de la ONU califica de ilegal la ocupación israelí y la equipara a las anexiones rusas

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Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, que controla la Franja de Gaza, anunciaron a última hora de este jueves una tregua bilateral para poner fin a once días de escalada bélica que se han saldado con cerca de 250 muertos, la inmensa mayoría en el lado palestino. Estas son, a falta de detalles sobre el contenido del pacto, las claves de un alto el fuego que ambas partes interpretan como una victoria:

¿Cuándo ha entrado en vigor la tregua, y hasta cuándo?

El alto el fuego se hizo efectivo a las 2.00 hora local de este viernes (23.00 GMT del jueves). En principio, se trata de una tregua indefinida.

¿Se está cumpliendo?

El Ejército israelí no había informado en la madrugada de este viernes de nuevas alarmas antiaéreas en las comunidades israelíes colindantes a la Franja, siendo la última notificada a la 01.51 hora local (10.51 GMT), informa Efe. Tampoco hubo bombardeos israelíes en Gaza durante la noche.

¿A qué se han comprometido?

Se da por sentado que ambas partes se han comprometido a detener las hostilidades (esencialmente, bombardeos contra Gaza por parte de Israel, y lanzamiento de cohetes contra territorio israelí por parte de Hamás). 

El Gobierno israelí, que no suele pronunciarse sobre los altos el fuego con las milicias, confirmó que se trata de un acuerdo incondicional. La oficina del primer ministro, Benjamin Netanyahu, señaló en ese sentido que se había acordado por unanimidad «aceptar la propuesta de Egipto de un alto el fuego mutuo y sin condiciones».

El portavoz de Hamás, Hazem Qassem, aseguró por su parte que habían obtenido «garantías de los mediadores» para una tregua «mutua y simultánea».

¿Qué incluye el acuerdo?

Este jueves por la noche no se conocían aún con detalle los términos de la tregua, pero, según medios citados por Efe, estos no incluirían, pese a las exigencias de Hamás, referencias a las tensiones por el desalojo de familias palestinas en Jerusalén Este ocupado o por las incursiones en la Explanada de las Mezquitas, hechos que el pasado día 10 de mayo desencadenaron la escalada bélica, sin precedentes en los últimos siete años.

¿Quién ha mediado para lograrlo?

El Gobierno israelí aseguró que se llegó a un acuerdo a partir de una propuesta de Egipto, mediador tradicional entre las dos partes. 

Como parte de su papel como mediador, El Cairo enviará en los próximos días dos delegaciones de seguridad a Tel Aviv, en Israel, y a los territorios palestinos para vigilar y hacer seguimiento de la tregua alcanzada, según informó la agencia palestina WAFA, citada por Europa Press.

¿Qué factores han influido para conseguirlo?

La presión internacional para un alto el fuego ante el constante incremento de víctimas y de destrucción puede haber sido una de las claves. No obstante, Netanyahu ya había rechazado anteriormente dos propuestas de tregua, insistiendo en que los ataques continuarían «el tiempo que fuese necesario», hasta que Israel alcanzase todos sus objetivos (en teoría, debilitar a Hamás eliminando a miembros de su cúpula, destruyendo sus infraestructuras y limitando su capacidad de atacar a Israel). Es posible también, por tanto, que los haya conseguido ya, o que considere suficiente lo logrado, tanto en el aspecto militar como en el político.

Por otro lado, con el paso de los días se iban incrementando las protestas palestinas, no solo en Gaza y, significativamente, en Cisjordania, sino también por parte de los árabes de origen palestino que viven dentro del territorio israelí, lo que ha supuesto un punto de inflexión importante que quizá Israel ha querido atajar.

¿Cómo ha sido la presión internacional?

La presión de la comunidad internacional a Netanyahu para que declarase un alto el fuego se incrementó en las últimas horas, incluyendo una petición de su gran aliado, el presidente de EE UU, Joe Biden, para que aceptase el cese de hostilidades. En concreto, Biden pidió este miércoles al primer ministro israelí una «significativa desescalada bélica» inmediata, y el enviado especial estadounidense para Oriente Medio, Tor Wennesland, también intensificó los contactos para facilitar la tregua.

La actividad diplomática fue especialmente intensa este jueves en la región. Una delegación egipcia viajó a Ramala, en Cisjordania, para informar a la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de la posible tregua, mientras el ministro alemán de Exteriores, Heiko Maas, visitaba tanto Israel como los territorios palestinos, en medio de los esfuerzos internacionales por lograr una desescalada de la violencia.

De hecho, el anuncio del cese de las hotilidades se produjo mientras aún se celebraba una reunión de la Asamblea General de la ONU convocada para presionar a las partes.

Bombardeo israelí en Gaza el 12 de mayo de 2021. Vídeo: IDF / Wikimedia Commons

¿Cómo han reaccionado las dos partes?

Ambos consideran que han salido reforzados del conflicto. El jefe del Estado Mayor israelí, el jefe del servicio de inteligencia interior y altos mandos del Ejército «informaron a los ministros sobre los importantes logros de Israel en la operación, algunos de los cuales no tienen precedentes», según detalló un comunicado oficial recogido por Efe.

Mientras, el portavoz de Hamás, Hazem Qassem, indicó en otro comunicado que «la resistencia demuestra en todos sus pasos que es el escudo del pueblo y el más capaz de proteger los fundamentos de la causa palestina».

En una entrevista para el diario Al Mayadeen, recogida por Europa Press, uno de los líderes de Hamás, Mushir al Masry, se refirió al alto el fuego como una «declaración de derrota» por parte de Israel y una «huida del campo de batalla». Al Masry celebró «la saga de victorias» de Hamás durante este último enfrentamiento, así como «la unidad y la revolución del pueblo», que supieron «penetrar en las fortalezas enemigas, disipando sus ilusiones e imponiendo nuevas reglas».

Cohetes lanzados desde Gaza hacia Israel, interceptados por el sistema de defensa Cúpula de Hierro, el 14 de mayo de 2021. Vídeo: Lisa Canalo / Wikimedia Commons

¿Qué otras reacciones ha habido?

El presidente estadounidense, Joe Biden, prometió este jueves, tras anunciarse el alto el fuego, seguir con su «diplomacia silenciosa e incansable» con Israel y Palestina. «Creo que los palestinos e israelíes merecen igualmente vivir de forma segura y disfrutar de las mismas medidas de libertad, prosperidad y democracia. Mi Administración seguirá con su diplomacia silenciosa e incansable con ese fin», afirmó, en una alocución televisada.

El secretario general de la ONU, António Guterres, dio la bienvenida al alto el fuego, pero a la vez pidió a los líderes de las partes enfrentadas que comiencen un «serio diálogo» sobre la raíz del conflicto.

¿Cuál es el balance de víctimas?

El lanzamiento de cohetes desde Gaza, más de 4.400 desde el inicio de la escalada, fue seguido por la operación militar israelí bautizada como «Guardian de los Muertos», que ha tenido un alto coste material y humano en el bloqueado enclave costero, donde viven dos millones de palestinos.

El Ejército israelí atacó más de 800 objetivos de las milicias y sus operativos, y asegura haber matado a más de 130 milicianos.

En los once días de escalada bélica han muerto al menos 232 palestinos, entre ellos 65 menores, y otros 1.900 han resultado heridos. En Israel han muerto 12 personas, entre ellas dos menores, y más de 340 han resultado heridas.

Durante estos días también se ha extendido la violencia y los enfrentamientos civiles entre palestinos e israelíes que, más allá de la escalada bélica que podría terminar este viernes, parecen haber abierto una crisis más profunda en la región.


Publicado originalmente en 20minutos
Con información de Efe y Europa Press
Vídeos no incluidos en el original

Las claves de la tregua entre Israel y Hamás: un acuerdo con el que ambos claman victoria tras casi 250 muertos

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El presidente de EE UU, Donald Trump, y el primer ministro en funciones de Israel, Benjamin Netanyahu, tras presentar el plan de paz de EE UU para Israel y Palestina, en la Casa Blanca. Foto: The White House / Flickr

«Mi propuesta presenta una oportunidad con la que ganarían los dos lados, una solución realista de dos Estados que resuelve el riesgo que suponía para la seguridad de Israel un Estado palestino». Así desvelaba este martes Donald Trump en la Casa Blanca su «acuerdo del siglo» para Israel y Palestina, en una solemne ceremonia en la que el presidente estadounidense apareció acompañado del primer ministro israelí en funciones, Benjamin Netanyahu, y en la que, significativamente, no hubo representación palestina alguna, ni de ningún otro mandatario internacional.

El acuerdo fue rechazado de inmediato y con vehemencia por el presidente palestino, Mahmud Abás (lo calificó como «la bofetada del siglo»), y también por las distintas facciones palestinas, en una poco habitual muestra de unidad. En las calles de Gaza y Cisjordania el anuncio fue recibido con airadas protestas, mientras que Amnistía Internacional señalaba que se trata de «un manual para más sufrimiento y abusos».

Esperado desde hace más de dos años, el plan se ha dado finalmente a conocer en un momento políticamente crucial, tanto para Trump como para Netanyahu. El primero busca ponerle un broche histórico a su política internacional y, según muchos analistas, desviar también el foco del juicio político (impeachment) al que está siendo sometido en el Senado; el segundo, imputado por fraude, cohecho y abuso de confianza en tres casos de corrupción, y candidato asimismo en los comicios generales que celebrará Israel en marzo (los terceros en menos de un año), recibe un espaldarazo fundamental de su principal y más poderoso socio, y prácticamente carta blanca para consolidar promesas electorales que hasta ahora eran consideradas problemáticas, como la anexión de las colonias en los territorios ocupados.

¿Cuáles son los principales puntos del acuerdo?

En esencia, el plan de Trump mantiene la llamada solución de los dos Estados, reconociendo el derecho palestino a tener uno, pero anteponiendo en cualquier caso la seguridad de Israel y dando por muertas las demarcaciones que aún reconoce la ONU. Para ello contempla cambios fronterizos que permitirían a Israel anexionarse parte de Cisjordania. También amplía el territorio palestino, pero lo fragmenta más aún, dejando dentro los asentamientos israelíes. Además, en uno de sus aspectos más polémicos, apuntala Jerusalén como «capital indivisible» de Israel y, en principio, de un futuro Estado palestino que se antoja inviable.

¿Quién lo ha negociado y cómo?

Uno de los principales artífices del plan es Jared Kushner, yerno de Trump y asesor del presidente. Kushner elaboró la hoja de ruta junto con el embajador estadounidense en Israel, David Friedman, y el ahora exenviado de la Casa Blanca para Oriente Medio, Jason Greenblatt.

El equipo hizo un primer amago de presentar su acuerdo hace dos años, pero acabó aplazándolo una y otra vez, alegando que quería esperar a contar con un gobierno estable en Israel, y esperando conseguir asimismo más apoyos de los países árabes. Mientras, Trump seguía haciendo gestos políticos hacia Netanyahu, como el reconocimiento por parte de Washington de la soberanía israelí sobre los Altos del Golán.

Los líderes palestinos se han negado a negociar en los términos previstos y, de hecho, no tienen contacto oficial con Washington desde que Trump reconoció a Jerusalén como capital de Israel en 2017.

¿En qué se diferencia de acuerdos anteriores?

El acuerdo presentado por Trump incluye nuevas propuestas referentes al trazado de fronteras entre Israel y los territorios ocupados, y concreta el estatus de Jerusalén, que en procesos de paz anteriores se había dejado siempre como uno de los puntos finales sobre los que llegar a un consenso, una vez que se hubiesen conseguido los demás objetivos.

Resucita además la solución de los dos Estados, que empezó a gestarse tras el reconocimiento mutuo entre Israel y la OLP en 1993, a través de los Acuerdos de Oslo de ese mismo año, pero que estaba enterrada en la práctica.

Trump argumentó este martes que su plan de paz es «diferente» al de sus predecesores porque contiene muchos más detalles «técnicos» de partida, con 80 páginas de propuestas. «Esta es la primera vez que Israel ha autorizado la publicación de un mapa conceptual que ilustra las concesiones territoriales que está dispuesto a hacer para conseguir la paz», subrayó.

Lo más novedoso, no obstante, quizá sea que, a diferencia de todos los demás acuerdos de paz negociados por Estados Unidos, la Casa Blanca no ha buscado esta vez la aprobación de Palestina antes de cerrar el plan, sino que le ha bastado la luz verde israelí.

¿Desde cuándo están estancadas las negociaciones?

El último plan de paz de Washington para la zona lo presentó Barack Obama en 2011, e incluía un Estado palestino basado en las fronteras previas a la Guerra de los Seis Días de 1967, «con intercambios de tierra acordados mutuamente», algo que Netanyahu rechazó.

Aunque hubo un intento, fallido, de retomar conversaciones directas entre palestinos e israelíes en 2010, la negociaciones están estancadas desde 2008, cuando Israel lanzó la operación Plomo Fundido en la franja de Gaza en respuesta al lanzamiento de cohetes por Hamás, una operación que dejó más de 1.400 palestinos muertos.

¿Cómo cambiarían las fronteras actuales con el plan de Trump, y cómo sería el Estado palestino?

La Casa Blanca señala que su plan «quiere lograr un reconocimiento mutuo del Estado de Israel como una nación-Estado para el pueblo judío y el futuro Estado de Palestina como el Estado-nación del pueblo palestino, con los mismos derechos civiles para todos los ciudadanos».

El mapa que marca muestra, no obstante, un Estado palestino hiperfragmentado a modo de archipiélago, con asentamientos israelíes en su interior, conectados con el Estado israelí a través de corredores que parten el territorio.

Asimismo, concede a Israel zonas al oeste del valle del río Jordán, situadas en Cisjordania, con lo que este área ocupada quedaría sin salida directa a Jordania, a la que estaría vinculada por dos carreteras que cruzarían territorio israelí. «El valle del Jordán, que es crítico para la seguridad nacional de Israel, estará bajo la soberanía de Israel», sentencia el texto. Se trata de una zona que constituye alrededor del 30% del territorio de Cisjordania, y su anexión es un reclamo histórico de la derecha israelí.

Cisjordania y Gaza estarían unidas a través de un túnel que las conectaría y que atravesaría Israel.

Según el plan, las nuevas fronteras garantizan una «expansión territorial» a los palestinos a través de territorios en el desierto del Negev, que supondrían un territorio «comparable en tamaño» al que controlaban antes de 1967.

Mapa del plan del gobierno estadounidense de Donald Trump para Israel y Palestina. Mapa: Presidencia de Estados Unidos

¿Qué pasaría con los asentamientos?

Los asentamientos israelíes existentes en Cisjordania (considerados ilegales por la legislación internacional) serían incorporados al Estado de Israel, que se comprometería a no construir nuevos asentamientos, expandir los existentes o aprobar planes para construcción en las zonas que serán parte del Estado de Palestino.

Israel no procederá a demoler estructuras existentes, una moratoria que no incluye «construcciones ilegales» ni aquellas que «supongan un riesgo de seguridad, según determine el Estado de Israel», o «demoliciones de castigo por actos de terrorismo».

Cerca del 97% de los israelíes en asentamientos en Cisjordania quedarían en territorio israelí adyacente, cifra similar para los palestinos en Cisjordania que quedarían en territorio palestino.

¿Y con Jerusalén?

La propuesta de la Casa Blanca reconoce a «Jerusalén como capital de Israel» y reitera que «debería permanecer como una ciudad íntegra».

Además, sostiene que Israel debe ser guardián de los lugares religiosos en Jerusalén, tanto judíos, como cristianos y musulmanes, y aboga por mantener el «estatus quo actual».

En cuanto a la capital del hipotético Estado palestino, el plan recoge que debería ubicarse en Jerusalén Este, concretamente, en «todas las zonas al este y el norte de las barreras de seguridad existentes, incluyendo Kafr Aqab, la parte este de Shuafat y Abu Dis», y que podría ser renombrada como Al Quds (como la denominan los árabes) o con otra denominación que decidan los palestinos.

Esto significa que la posible capital palestina se localizaría en barrios ubicados en las afueras de la Jerusalén actual.

¿Algún cambio sobre Gaza?

El plan recuerda que Gaza ha estado gobernada por el grupo islámico Hamás, al que describe como una «organización terrorista, responsable de asesinatos y ataques a miles de israelíes», y concede a Israel la soberanía de las aguas territoriales de la franja, al considerar que son vitales para la seguridad del Estado israelí.

Advierte además de que «no habrá mejoras significativas en Gaza hasta que haya un alto el fuego con Israel, una desmilitarización completa de la franja y una estructura de gobierno que permita a la comunidad internacional invertir de forma segura y cómoda» para mejorar su economía.

La iniciativa propone también que Israel ceda territorio a los palestinos cerca de Gaza, que pueden ser «áreas pobladas y no pobladas».

¿Quién se encargaría de la seguridad, y cómo?

Israel mantendría una «responsabilidad de seguridad predominante» del Estado de Palestina, con las fuerzas palestinas encargadas únicamente de la seguridad interna, de la lucha antiterrorista, la seguridad fronteriza y la respuesta a desastres.

Israel sería responsable de la seguridad en los cruces internacionales y, en el caso de Rafá, en la frontera con Egipto, se abordarían acuerdos específicos con El Cairo.

Además, Israel mantendría el control del espacio aéreo al oeste del río Jordán, mientras que la Armada israelí podría bloquear la entrega de «armas y materiales para la fabricación de materiales en el Estado de Palestina, incluida Gaza».

Gráfico: Carlos G. Kindelán / 20minutos

¿Podrían regresar los refugiados palestinos?

La iniciativa aborda uno de los temas más espinosos en unas hipotéticas negociaciones entre israelíes y palestinos: el derecho de retorno de los refugiados.

A ese respecto, y pese a lo que establece la resolución 194 de la ONU, el plan marca que «no habrá derecho de retorno, o absorción de ningún refugiado palestino en Israel».

Establece, no obstante, tres opciones para los refugiados palestinos que busquen un sitio permanente de residencia: «absorción» para aquellos registrados en la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) en el futuro Estado palestino; integración en sus países actuales de acogida; o su reasentamiento en los países miembros de la Organización de Cooperación Islámica (OCI), que los acepten.

En ese sentido, el plan indica que «los hermanos árabes tienen la responsabilidad moral de integrar a los refugiados en sus territorios del mismo modo que los judíos fueron integrados en el Estado de Israel».

¿Qué limitaciones tendría el nuevo Estado palestino

Entre otras, Palestina no podría alcanzar acuerdos militares, de Inteligencia o seguridad con ningún Estado u organización que «afecte de forma adversa la seguridad de Israel» ni podrá desarrollar capacidades «militares o paramilitares» dentro o fuera de su territorio.

Tampoco podría unirse a organizaciones internacionales sin el consentimiento de Israel, y debería retirar sus demandas contra Israel, EE UU y los ciudadanos de estos países ante el TPI, la CIJ o cualquier otro tribunal, así como no recurrir a Interpol contra ellos.

Así, el nuevo estado no podría tener «capacidades que puedan amenazar al Estado de Israel», mientras que Israel tendría derecho a «desmantelar o destruir» instalaciones utilizadas para producir armas o con «propósitos hostiles», así como para adoptar medidas de seguridad para mantener Palestina «desmilitarizada».

¿Recoge el plan alguna demanda palestina?

Según declaró a Efe el experto de la Universidad George Washington Nizar Farsakh, antiguo asesor del ex primer ministro palestino Salam Fayad y miembro en el pasado del equipo negociador palestino, cuando se lee el plan, «si se compara con la postura palestina publicada en la página web del Departamento de Estado, es exactamente lo opuesto a lo que los palestinos piden».

Trump prometió a los palestinos una inversión de 50.000 millones de dólares para duplicar su PIB y crear un millón de empleos, pero exigió a cambio un alto el fuego con Israel, cambios en su estructura de Gobierno y la desmilitarización de Gaza.

¿Hay un plazo para negociar?

Aunque Abás ya ha dicho «mil veces no» a la propuesta, Trump le ha dado cuatro años para superar sus reservas y sentarse a la mesa de negociación, y el Gobierno israelí ha indicado asimismo que está dispuesto a esperar ese tiempo.

¿Cómo ha reaccionado la comunidad internacional?

La ONU seguirá defendiendo una solución al conflicto que pase por la creación de dos Estados basados en las fronteras previas a 1967, según dijo este mismo martes el secretario general de la organización, António Guterres.

Entre los países árabes, Egipto llamó a Israel y Palestina a considerar «a fondo» el plan de Trump, y aplaudió los esfuerzos de Washington para lograr un acuerdo «amplio y justo». En una línea semejante se expresó Arabia Saudí, valorando positivamente los esfuerzos de EE UU y reafirmando su «apoyo a lograr una solución justa y completa al conflicto palestino».

Rusia considera que el plan debe ser analizado por el llamado Cuarteto de Madrid, formado por EE UU, la ONU, la UE y la propia Rusia, mientras que Irán afirmó que el acuerdo busca «humillar» a los musulmanes, y que «está muerto» antes de ver la luz. Es un plan que «nace muerto», indicó igualmente el Gobierno de Turquía.

El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, afirmó por su parte que el plan de paz «podría ser un paso positivo hacia adelante», y la Unión Europea señaló, a través de su Alto Representante para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, que la propuesta «supone una oportunidad para relanzar los muy necesarios esfuerzos» para lograr un acuerdo.

El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, afirmó por su parte que el plan de paz «podría ser un paso positivo hacia adelante», y la Unión Europea señaló, a través de su Alto Representante para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, que la propuesta «supone una oportunidad para relanzar los muy necesarios esfuerzos» para lograr un acuerdo.


Publicado originalmente en 20minutos
Con información de Efe y Europa Press

Las claves de un ‘acuerdo del siglo’ a la medida de Israel, inaceptable para los palestinos y oportuno para Trump

«Mi propuesta presenta una oportunidad con la que ganarían los dos lados, una solución realista de dos Estados que resuelve el riesgo que suponía para la seguridad de Israel un Estado palestino». Así desvelaba este martes Donald Trump en la… Leer

Contendores ardiendo durante una protesta cerca de Ramala, Cisjordania, el 10 de octubre de 2015. Foto: Wikimedia Commons

Después de un par de semanas de relativa calma, la oleada de violencia que sufren desde hace cerca de dos meses Israel y los territorios palestinos ocupados ha vuelto a repuntar con fuerza en estos últimos días, no solo en Jerusalén, el epicentro de los enfrentamientos y de una tensión cada vez más insoportable, sino también en otras ciudades, como Hebrón.

Con la atención del mundo desplazada hacia otras zonas de la región, como Siria o Irak, donde la guerra y el terror yihadista empiezan a tener consecuencias cada vez más serias para Occidente (la crisis de los refugiados, brutales ataques en ciudades europeas como los atentados de París de esta semana), y con un proceso de paz completamente paralizado, la mayor parte de los enfrentamientos actuales están protagonizados por jóvenes que se niegan a aceptar un statu quo basado, esencialmente, en que todo siga igual.

Es la llamada ya «generación de Oslo», en referencia a los palestinos nacidos tras los acuerdos alcanzados en la capital noruega en 1993, unos acuerdos que propiciaron la creación de la Autoridad Nacional Palestina, y cuyo objetivo último, lograr una solución permanente al conflicto, y el cumplimiento de la resolución 242 de la ONU, en la que se exige la retirada israelí de los territorios ocupados, hace ya mucho que quedó en agua de borrajas.

Frustrados por la falta de futuro, criados en el opresivo entorno de la ocupación, y con poco que perder, muchos de estos jóvenes parecen haberse sacudido el miedo a las tropas israelíes, al tiempo que se sienten cada vez menos representados por el a menudo inoperante gobierno palestino y sus llamamientos a la resistencia pacífica. Son, además, muy conscientes de la firme determinación del Gobierno israelí de Benjamin Netanyahu de no avanzar ni un milímetro hacia esa solución de dos Estados en la que, al menos a medio plazo, muy pocos confían ya.

La «intifada de los cuchillos»

Algunos analistas han calificado esta nueva oleada de violencia como «la intifada de los cuchillos», ya que, a pesar de que ha habido varios casos de tiroteos y atropellos intencionados, la mayor parte de los ataques protagonizados por palestinos se producen con armas blancas. De momento, es difícil saber si se trata de una revuelta con la suficiente extensión y proyección en el tiempo como para poder ser comparada con las dos anteriores intifadas (la primera, la «intifada de las piedras», entre 1987 y 1991, y la segunda, la «intifada de Al Aqsa», entre 2000 y 2005), pero lo cierto es que se trata de la mayor insurrección contra la ocupación israelí desde el último gran levantamiento popular, hace ya diez años.

Solo entre el 1 y el 13 de octubre, los días de mayor violencia hasta ahora, se registraron al menos 17 casos de apuñalamientos de israelíes por jóvenes árabes, y en esta última semana, los ataques y las represalias han sido prácticamente diarios.

El pasado domingo, seis israelíes resultaron heridos y dos palestinos muertos por disparos de las fuerzas de seguridad de Israel en al menos tres incidentes registrados en Cisjordania. El lunes, una joven palestina fue tiroteada tras intentar apuñalar a guardias israelíes en un control, también en la Cisjordania ocupada. El martes, soldados israelíes mataron a un palestino que supuestamente pretendía acuchillarles en Jerusalén, donde dos adolescentes palestinos resultaron asimismo heridos de bala tras acuchillar al vigilante de un tranvía. El viernes murieron dos colonos judíos por disparos cerca del asentamiento ilegal de Otniel, en Hebrón; dos palestinos perdieron también la vida en enfrentamientos con soldados israelíes cerca de esta ciudad, y un tercero falleció a causa de las heridas recibidas en un ataque anterior

Uno de los episodios que más denuncias ha provocado, no obstante, se produjo el jueves, cuando soldados israelíes disfrazados de civiles irrumpieron en un hospital de Hebrón para detener a un palestino al que responsabilizaban de otro acuchillamiento, y acabaron matando a tiros a un joven que se encontraba con el acusado. La rocambolesca entrada de los agentes fue grabada en vídeo por las cámaras de seguridad del hospital, y las imágenes han sido ampliamente difundidas en Internet.

En total, en todo el mes de octubre y lo que llevamos de noviembre, esta última oleada de violencia ha causado ya cerca de un centenar de muertos. La gran mayoría (al menos 78) de los fallecidos son palestinos, y de ellos, una treintena eran presuntos atacantes. Las víctimas mortales israelíes sobrepasan la docena (14 muertes registradas hasta ahora). Hay, además, centenares de heridos, y el miedo (en algunas zonas de Jerusalén, a simplemente caminar por la calle) se ha apoderado de una gran parte de la sociedad israelí.

Éstas son, en preguntas y respuestas, algunas claves para entender mejor lo que está pasando.

¿Cómo y cuándo empezó?

La situación comenzó a deteriorarse a mediados del pasado mes de septiembre, con los enfrentamientos ocurridos tras la propagación de rumores según los cuales Israel pretendía modificar el antiguo acuerdo que permite el acceso al Monte del Templo (para los judíos), o Explanada de las Mezquitas (para los musulmanes). Esta zona de la parte ocupada de Jerusalén, un área vigilada y controlada por las fuerzas israelíes, alberga la mezquita de Al Aqsa y la denominada Cúpula de la Roca, y es considerada el tercer lugar más sagrado del islam. El área tiene asimismo una gran importancia religiosa para los judíos, al ser el emplazamiento de los históricos templos bíblicos.

Israel ocupa la zona desde que se la arrebató a Jordania durante la guerra de 1967, pero el área ha permanecido bajo administración musulmana desde entonces. Un acuerdo alcanzado hace décadas permite el acceso a visitantes no musulmanes, pero la cada vez mayor presencia de visitantes judíos, en muchos casos alentados por activistas que buscan incrementar la presencia judía en el Monte, ha hecho crecer entre los palestinos el temor de que Israel esté planeando modificar los términos del acuerdo.

El Gobierno israelí ha negado estos rumores, y acusa a las autoridades palestinas, tanto civiles como religiosas, de haberlos propagado para incitar a la violencia. Por su parte, el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abás, ha acusado a los colonos judíos y a las autoridades israelíes de realizar «actos de agresión» que han motivado la reciente ola de violencia.

El 13 de septiembre, la Policía israelí entró en la Explanada de las Mezquitas, tras los disturbios ocurridos en la víspera del Año Nuevo judío como consecuencia de los mencionados rumores. Los enfrentamientos, espoleados por la decisión israelí de limitar el acceso de los palestinos al Monte como medida de seguridad, continuaron durante varios días, y el día 28 de ese mismo mes, después de que el Gobierno israelí autorizase la utilización de fuego real contra quienes lanzasen piedras, las fuerzas de seguridad israelíes volvieron a entrar en la Explanada. Durante una intervención ante la Asamblea General de la ONU, Abás afirmó que Palestina está viviendo la situación más crítica desde 1948, y dio por enterrados los acuerdos de Oslo.

El 1 de octubre, una pareja de colonos judíos fueron asesinados ante sus cuatro hijos cerca de Nablús, en la Cisjordania ocupada. Dos días después empezaron los apuñalamientos.

¿Quiénes están realizando los ataques?

La mayoría son jóvenes, en muchos casos menores de edad, y con una mayor presencia de mujeres, incluyendo universitarias, que en revueltas anteriores.

Si bien no parece existir una organización centralizada, se ha hablado de una cierta coordinación a través de las redes sociales, donde, en cualquier caso, se han multiplicado los mensajes que exhortan a realizar más ataques, y han ido ganando terreno etiquetas como «Jerusalén Intifada» o «Intifada de cuchillos». Varios de estos ataques han sido filmados con teléfonos móviles o por cámaras de seguridad, y compartidos en Internet.

¿Cómo se producen y con qué consecuencias?

Aunque la tensión y alarma social habían descendido ligeramente a finales de octubre, la cadena de apuñalamientos e intentos de apuñalamiento de jóvenes palestinos contra israelíes (en su mayoría colonos o uniformados) se ha reanudado en estas dos últimas semanas como un goteo permanente. A principios de noviembre, y según informó Efe, el servicio de emergencias israelí aseguró haber tratado en 40 días a un total de 170 víctimas de ataques, de los que 12 habían muerto y 159 resultaron heridos, una veintena de ellos, graves. En muchos de los casos los atacantes y supuestos atacantes fueron abatidos por las fuerzas de seguridad o por viandantes armados.

Las autoridades palestinas cuestionan esas cifras y consideran que en muchos de los sucesos no hay pruebas que demuestren que los palestinos iban a atacar, por lo que hablan de «ejecuciones sumarias» de inocentes. También denuncian un «uso abusivo de la fuerza» que ha llevado a matar a muchos atacantes pese a que se les podía haber neutralizado y detenido sin matarlos, así como abusos y maltrato innecesario a los agresores una vez neutralizados.

Entre los casos más controvertidos se encuentra el de dos primos del clan Yabari de Hebrón, de 15 y 17 años, que, según denunció el gobernador de esta ciudad, recibieron 57 balas entre ambos y que «no habían atacado a nadie». Otro caso que ha levantado fuertes críticas es la muerte de Thawarat Ashrawi, una anciana de 72 años de Hebrón que fue acribillada por soldados que aseguran que trató de atropellarlos, mientras su familia lo niega y afirma que iba a poner gasolina y no se dio cuenta de que le daban el alto.

A las decenas de palestinos abatidos en ataques (demostrados o supuestos) se unen los muertos por fuego israelí en protestas contra puestos de control militares israelíes en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Este, lo que eleva los palestinos muertos a cerca de 80, y a los que se suman más de 7.000 heridos (según la ONU) y 1.200 detenidos, en su mayoría jóvenes.

¿Cómo está reaccionando la sociedad israelí?

Según un recientre sondeo de la agencia Midgham, realizado entre ciudadanos israelíes, y citado por Efe, el 75% de los encuestados cree que «se debe matar a los terroristas sorprendidos en el lugar de un ataque», frente a un 25% que discrepa. Además, un 55% de israelíes judíos opina que no se debe imputar por sus actos a quienes «atacan a un terrorista después de que haya sido neutralizado».

Tanto la policía israelí como el propio alcalde de Jerusalén, Nir Barkat, han llegado a aconsejar a los habitantes de la ciudad que posean licencia de armas que salgan con ellas a la calle. El alcalde insiste en que solo la mano dura logrará frenar esta oleada de violencia: «El número de terroristas que ha surgido de los barrios árabes de Jerusalén en las últimas semanas es inaceptable. Lo que hay que hacer para proteger la vida de la gente es bloquear y controlar muchísimo más de lo que hicimos en el pasado», aseguró.

Las zonas palestina e israelí de Jerusalén, separadas desde hace décadas por una frontera invisible, están estos días más divididas que nunca. Como escribe para la agencia Efe la periodista Ana Cárdenes, «consumados o frustrados, probados o dudosos, los ataques que se registran cada día han alterado las rutinas de muchos, y han extendido el miedo en ambos lados, convirtiendo en habitual una violencia que, según los expertos en seguridad, no va a acabarse pronto».

El miedo a los ataques con arma blanca hace que las calles del corazón de Jerusalén y de la Ciudad Vieja estén excepcionalmente silenciosas y semivacías: «El ulular de las sirenas y el sobrevuelo de los helicópteros se ha convertido en la música de fondo de la ciudad. Las agresiones, casi espontáneas y perpetradas por palestinos sin antecedentes ni especial militancia política, son prácticamente imposibles de abortar, y el nerviosismo de los israelíes es palpable», explica por su parte Beatriz Lecumberri en El País.

Este miedo está también muy presente en la comunidad palestina, donde todos se han convertido en sospechosos, y donde muchos temen ser atacados por colonos u hostigados y detenidos por la policía.

¿Será una nueva intifada?

El histórico dirigente palestino de Al Fatah Marwan Barghouti, uno de los principales líderes de la segunda intifada, y actualmente encarcelado a perpetuidad en una prisión israelí, hizo pública una carta en la que saluda a la «nueva generación que se ha levantado para defender su derecho y su deber de resistir la ocupación […], desarmada y enfrentándose a una de las mayores potencias militares mundiales».

La revuelta tiene, ciertamente, algunos elementos en común con la segunda intifada, cuyo detonante fue la visita del entonces líder de la oposición israelí, Ariel Sharon, a la Explanada de las Mezquitas. Y para muchos analistas, el colapso de las negociaciones de paz, la falta de esperanza por conseguir un Estado propio a medio, o incluso a largo plazo, y la ira y la frustración acumuladas por varias generaciones durante una ocupación que dura ya cerca de medio siglo, han creado el caldo de cultuvo necesario para el estallido de un nuevo levantamiento en toda regla.

No obstante, de momento existen algunas diferencias importantes con las intifadas anteriores, empezando por el hecho de que el presidente palestino, Mahmud Abás, ha reiterado su rechazo a la violencia y ha mantenido, aunque siempre del modo más discreto posible, la coordinación entre las fuerzas de seguridad palestinas y las israelíes, en un intento de evitar que los enfrentamientos se descontrolen por completo.

Durante la anterior intifada, los ataques estaban respaldados por grupos organizados de militantes palestinos que contaban, además, con el apoyo tácito de sus líderes. La mayoría de estos grupos han sido desmantelados durante los últimos años, y muchos de sus miembros están ahora en prisión. Los ataques actuales los llevan a cabo individuos sin afiliaciones políticas declaradas y que parecen actuar por su cuenta. Las milicias de Al Fatah no se han sumado, y Hamás ha mantenido la tregua en la Franja de Gaza, el territorio que controla, pese a alentar la revuelta en Jerusalén y Cisjordania. Esta actuación de lo que se ha venido en llamar «lobos solitarios» ha hecho que, para Israel, su tradicional respuesta puramente militar sea esta vez mucho más complicada.

¿Hay alguna solución a la vista?

No parece probable, al menos mientras el proceso de paz continúe bloqueado. Y los actuales dirigentes de ambas partes tienen poca voluntad, en el caso de Netanyahu, o pocas posibilidades, en el de Abás, de reactivarlo.

El dirigente palestino cuenta con cada vez menos apoyo popular (una encuesta reciente indica que el 65% de los palestinos desea su renuncia), y es continuamente desacreditado como negociador válido por el Gobierno israelí, que le reprocha carecer de la fuerza suficiente para lograr acuerdos. Abás no ha condenado los ataques perpetrados en las calles israelíes, pero mantiene su oposición a una nueva intifada armada y sigue ofreciendo a Israel una cooperación en materia de seguridad que desgasta su imagen entre los palestinos

Como explica el experto en Oriente Medio Nathan Thrall, del International Crisis Group, en un artículo publicado en la revista London Review of Books, cuando Abás llegó al poder en 2005, el veterano líder palestino, «más un funcionario que un líder carismático como Arafat», fue visto como una figura de transición tras los acuerdos de Oslo, en un momento en que los palestinos estaban exhaustos tras las luchas de la segunda intifada, y con una gran necesidad de reconocimiento internacional. El contexto, con Hamás y Barghouti ausentes en las elecciones, los líderes fundadores de Al Fatah asesinados o en prisión, y el firme apoyo del Gobierno estadounidense de George W. Bush, también le favoreció.

Pero estas condiciones, como era previsible, no duraron mucho: «Los palestinos —señala Thrall— se recuperaron de la fatiga de luchar contra Israel, Hamás volvió a la política, el mantenimiento de la ocupación alentó la resistencia, los líderes que cuestionaron esa resistencia fueron desacreditados, y una nueva generación de palestinos creció sin los recuerdos del coste que supusieron las intifadas, e incapaz de entender por qué sus padres aceptaron no solo abandonar la lucha contra el ejército israelí, sino incluso cooperar con él, a través de acuerdos negociados por el propio Abás». Como apuntaba recientemente el dirigente palestino Nabil Shaat, «han pasado 22 años desde la firma de los Acuerdos de Oslo y en la Cisjordania ocupada hay ya 400.000 colonos».

Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu (en el cargo desde 2009, y reciente ganador de las elecciones celebradas el pasado 18 de marzo), se mantiene en la idea de que el mejor proceso de paz es el actual proceso inexistente. Como dijo el pasado 27 de octubre, «Israel vivirá siempre con la espada en la mano», para explicar después su intención de mantener el control total sobre toda la Palestina histórica, incluyendo los territorios ocupados.

El dirigente israelí, enfrentado al presidente Obama tras el acuerdo nuclear alcanzado con Irán, y criticado por numerosos líderes europeos, está sometido, además, a una gran presión por parte del ala más dura de su coalición de gobierno, que le exige una respuesta aún más contundente (ya se ha incrementado el número de efectivos militares en Jerusalén y Cisjordania, y se han relajado las normas sobre cuándo puede abrirse fuego sobre los manifestantes) ante la actual oleada de violencia palestina.

Una de las principales características de esta nueva revuelta es, probablemente, la ausencia de actores políticos con la suficiente credibilidad como para poder frenarla o encontrar soluciones.

En este sentido, el profesor del Centro de Relaciones Internacionales de la Universidad de Groninga (Holanda) Sami Faltas señala al diario El Universal que «en la primera intifada había todavía lazos entre Israel y Palestina por actividades económicas transfronterizas, así como actores políticos que creían en la viabilidad de los acuerdos de Oslo, pero hoy la gente tiene menos que perder que antes. La interdependencia económica, que es fórmula para la paz, no existe más, debido al cierre de las fronteras y a la construcción, por parte de Israel, de un muro de hormigón de hasta ocho metros de altura».

Con Estados Unidos alejado de una implicación directa en el proceso de paz, no existen tampoco otros actores externos de peso con la capacidad de detener una posible irrupción de violencia a gran escala. Egipto, socio reconocido por ambas partes, no está en condiciones de asumir responsabilidades como consecuencia de su situación interna, y la Unión Europea, indica Faltas, ha perdido influencia «por pensar de manera equivocada que resolvería el conflicto solo inyectando dinero».


Publicado originalmente en 20minutos

El precio de un ‘statu quo’ insostenible: las claves de la ola de violencia en Palestina

Después de un par de semanas de relativa calma, la oleada de violencia que sufren desde hace cerca de dos meses Israel y los territorios palestinos ocupados ha vuelto a repuntar con fuerza en estos últimos días, no solo en Jerusalén, el epicentro de los enfrentamientos y de una tensión cada vez más insoportable, sino también en otras ciudades, como Hebrón. Con la atención del mundo desplazada hacia otras zonas de la región, […]

Una selección de fotografías tomadas en Oriente Medio esta semana. Pincha en los enlaces de las localizaciones para ver las imágenes.


Bam, Irán, 19/12/2013: Una jugadora de baloncesto entrena en un pabellón deportivo de Bam, la localidad iraní que hace ahora diez años, el 26 de diciembre de 2003, quedó arrasada por un terrible seísmo de 6,6 grados en la escala de Richter. Entre 35.000 y 46.000 personas (alrededor del 40% de la población total de la ciudad) murieron a causa del terremoto; 50.000 resultaron heridas y 80.000 perdieron su hogar. El 70% de las casas, la mayoría de ellas de construcción precaria, quedaron destruidas. Foto: Atta Kenare / AFP


Belén, Cisjordania (Palestina), 25/12/2013: Una niña enciende una vela en el interior de la Basílica de la Natividad, el lugar donde la tradición señala el nacimiento de Jesús, y al que cada año por estas fechas acuden miles de peregrinos cristianos de todo el mundo. Foto: Oren Ziv


Belén, Cisjordania (Palestina), 24/12/2013: Niños palestinos vestidos de Papá Noel, en las afueras de la Basílica de la Natividad. Foto: Majdi Mohammed / AP


Ammán, Jordania, 25/12/2013: Un refugiado iraquí, cristiano ortodoxo, asiste a la misa del día de Navidad en una iglesia de la capital jordana a la que acudieron familias iraquíes y sirias para rezar por sus respectivos países. Foto: Mohammad Hannon / AP


Mansura, Egipto, 24/12/2013: Un hombre trata de pasar entre los restos dejados por la explosión en un cuartel de la policía que mató a al menos una docena de personas, y dejó heridas a más de un centenar, el pasado martes. El Gobierno egipcio instaurado por los militares culpó del atentado a los Hermanos Musulmanes y al día siguiente declaró al grupo «organización terrorista». La Hermandad, sin embargo, condenó la acción y negó toda responsabilidad en el ataque. Foto: Ahmed Ashraf / AP


El Cairo, Egipto, 27/12/2013: Un manifestante se pone a cubierto durante los enfrentamientos de este viernres entre manifestantes en apoyo de los Hermanos Musulmanes y la policía, tras declarar el Gobierno provisional «organización terrorista» al grupo islamista. Una persona murió y cerca de 150 fueron detenidas durante los disturbios. Foto: Khaled Elfiqi / EPA


Beirut, Líbano, 27/12/2013: Un hombre lleva en brazos a una mujer herida tras el atentado con coche bomba que sacudió la capital libanesa a primeras horas de la mañana de este viernes. En la acción terrorista perdieron la vida un total de ocho personas, incluyendo al exministro de Finanzas Mohamed Chatah, economista, diplomático, antiguo consejero de los exjefes de gobierno Fuad Siniora y Saad Hariri, y probable objetivo del atentado. Foto: Bilal Hussein / AP


Beirut, Líbano, 29/12/2013: Familiares y amigos del exministro de Finanzas libanés Mohamed Chatah, asesinado el viernes en un atentado con coche bomba, durante el funeral. Foto: Bilal Hussein / AP


Rahat, Israel, 25/12/2013: Un grupo de beduinos se reúne en torno a la tumba de Salah Abu Latif, un beduino funcionario israelí de 22 años que fue asesinado, según el Gobierno israelí, por un francotirador palestino, cuando trabajaba en la valla de separación entre Israel y Gaza. Tras la muerte de Latif, el ejército israelí lanzó el martes una serie de ataques aéreos contra la Franja de Gaza, en los que, según fuentes palestinas, murió una niña de tres años de edad. Foto: Oded Balilty / AP


Bilin, Cisjordania (Palestina), 27/12/2013: Un joven palestino lanza piedras contra soldados israelíes durante un acto en contra de los asentamientos judíos en territorio ocupado por Israel, cerca de Ramala. Al fondo, el muro de separación israelí. Foto: Mohamad Torokman / Reuters


Estambul, Turquía, 27/12/2013: Manifestantes contra el Gobierno se enfrentan a la policía durante una protesta por el escándalo de corrupción que ha causado en apenas una semana la dimisión de tres ministros, el relevo de otros diez y la renuncia a sus escaños de tres parlamentarios del AKP, el partido islamista gobernante en Turquía. El escándalo ha destapado las luchas internas en el seno del islamismo turco y ha puesto contra las cuerdas al primer ministro, Racip Tayip Erdoğan. Las claves, aquí. Foto: Tolga Bozoglu / EPA


Homs, Siria, 25/12/2013: Un gorro de Papá Noel, entre las ruinas de un edificio destruido por las bombas. El papa Francisco dedicó a Siria una mención especial en su primer discurso de Navidad: «Demasiadas vidas ha destruido en los últimos tiempos el conflicto de Siria. Sigamos rezando al Señor para que el amado pueblo sirio se vea librado de sufrimientos, y las partes en conflicto permitan el paso de la ayuda humanitaria», dijo. Foto: Yazan Homsy / Reuters


Alepo, Siria, 29/12/2013: Varios niños cruzan con sacos llenos de pertenencias la zona de Karaj al Hajez, un pasaje en Alepo que separa el barrio de Bustan al Qasr, controlado por los rebeldes, del de Al Masharqa, bajo el control del régimen. Foto: Ammar Abdullah / Reuters


Alepo, Siria, 28/12/2013: Una niña es rescatada de entre las ruinas de un edificio que se vino abajo tras dos ataques aéreos de fuerzas del régimen, en el barrio de Maysar, según informaron activistas de la oposición siria. Foto: Jalal Alhalabi / Reuters

Esmirna, Turquía, 22/12/2013: Al menos 10 personas murieron y 17 resultaron heridas al naufragar un remolcador en un astillero militar cercano a la ciudad turca de Izmir (Esmirna), en el mar Egeo, por causas que aún se desconocen, y que están siendo investigadas, según informaron fuentes militares. Foto: Emin Menguarslan / Anadolu


Tel Aviv, Israel, 26/12/2013: Manifestación cerca de la sede del Ministerio de Defensa israelí, en contra de la liberación de prisioneros palestinos que llevará a cabo el Gobierno a partir de esta semana, como parte del acuerdo patrocinado por Estados Unidos en julio, dentro de los esfuerzos por reanudar las conversaciones de paz. Foto: Ammar Awad / Reuters


Beersheva, Israel, 26/12/2013: Pilotos de la Fuerza Aérea israelí lanzan sus gorras al aire celebrando su graduación, en la base aérea de Hatzerim, en el desierto del Neguev. Foto: Jack Guezjack / AFP


Estambul, Turquía, 27/12/2013: Dos niños, junto a una de las obras del escultor indio Anish Kapoor que se exhiben hasta el próximo mes de febrero en el museo Sakip Sabanci. Foto: Murad Sezer / Reuters


El Cairo, Egipto, 24/12/2013: Cuatro artistas egipcios, Hany Rashed, Ganzeer, Ahmed Hefnawy y Ammar Abu Bakr, han montado estos días en un hotel del centro de la capital del país la exposición Libertad, en lo que han denominado «Museo de la Revolución». La muestra incluye graffitis, pinturas, esculturas y hasta simulaciones de granadas de gas. Foto: Rowan El Shimi / Al Ahram. Más fotos, aquí.


Bursa, Turquía, 26/12/2013: El Ayuntamiento de la ciudad turca de Bursa, en el noroeste del país, ha decidido iluminar con tecnología LED los edificios históricos más emblemáticos de la localidad. Foto: Anadolu Agency. Más fotos, aquí.


Ciudad de Gaza, Gaza (Palestina), 29/12/2013: Un hombre cabalga por una playa a orillas del Mediterráneo. Foto: Hatem Moussa / AP

Las fotos de la semana

Una selección de fotografías tomadas en Oriente Medio esta semana. Pincha en los enlaces de las localizaciones para ver las imágenes.

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Alepo, Siria, 15/12/2013: Una mujer herida camina con sus hijos tras un bombardeo aéreo de las fuerzas gubernamentales sirias, en un área de la ciudad controlada por la oposición. La ofensiva lanzada por el régimen sirio en la última semana sobre la ciudad de Alepo, por cuyo control lleva luchando con los rebeldes desde hace más de un año, ha dejado al menos 300 muertos, según denunció este domingo el Observatorio Sirio por los Derechos Humanos (pro rebelde). De ellos, al menos 87 serían menores de edad. La ONG sostiene que tanto el casco urbano como la periferia de la ciudad están bajo un fuego constante, lo que ha llevado a Médicos Sin Fronteras a hablar de «los peores días» de la guerra en la zona. Foto: Mohammed Al Khatieb / AFP


Ciudad de Gaza, Gaza (Palestina), 16/12/2013: Personas rescatadas por los voluntarios de los servicios de emergencia, tras las graves inundaciones de hace unos días en la Franja de Gaza. Además de los miles de desplazados (la ONU llegó a hablar de 10.000), más del 10% de los invernaderos y campos de Gaza quedaron destruidos o dañados por la tormenta, al igual que unas 50 explotaciones avícolas y ganaderas. Foto: Mohammed Salem / Reuters


Gaza, Palestina, 18/12/2013: Una familia palestina, refugiada en una tienda tras las inundaciones que anegaron la Franja la semana pasada. Foto: Mohammed Abed / AFP


El Cairo, Egipto, 18/12/2013: Estudiantes de la Universidad de Ain Shams prenden fuego a una copia del borrador de la nueva constitución egipcia. El referéndum para la aprobación de la nueva carta magna se celebrará los próximos días 14 y 15 de enero, dentro del plan de transición diseñado por el gobierno instaurado por los militares tras el golpe de Estado que depuso al presidente Mohamed Mursi. Foto: Reuters


El Cairo, Egipto, 20/12/2013: Un seguidor del depuesto presidente Mohamed Mursi devuelve una granada de gas lacrimógeno lanzada por la policía, durante enfrentamientos en el distrito de Ciudad Naser. Foto: Mohamed Abd El Ghany / Reuters


Estambul, Turquía, 21/12/2013: El primer ministro turco, Recep Tayip Erdoğan, acusó el sábado a «grupos internacionales», «algunos embajadores» y «alianzas oscuras» de estar detrás del escándalo de corrupción que ha dejado al descubierto profundas divisiones entre él y un clérigo musulmán que vive en EE UU y que lo ayudó a llegar al poder. Dieciséis personas, incluyendo los hijos de dos ministros y el jefe del banco estatal Halkbank, han sido detenidas, en una investigación por corrupción que Erdoğan calificó de «operación sucia» para minar su mandato. La situación parece ser un reflejo de la lucha de poder existente entre Erdoğan y su exaliado, el clérigo Fethullah Gulen, quien tiene influencia sobre la policía y el poder judicial. Decenas de jefes de policía han sido retirados de sus puestos desde que empezaron los arrestos por sospechas de sobornos. En la imagen, policías frente al juzgado donde se presentaron algunos de los cargos. Foto: Osman Orsal / Reuters


Qalqilya, Cisjordania (Palestina), 19/12/2013: Familiares y amigos, durante el funeral de Saleh Yassin, un miembro de las fuerzas de seguridad palestinas muerto por disparos de soldados israelíes cuando éstos trataban de arrestarlo, el pasado jueves. Foto: Mohamad Torokman / Reuters


Baalbek, Líbano, 17/12/2013: Soldados libaneses examinan los restos de un coche bomba que explosionó el pasado martes junto a un puesto de Hizbulá situado cerca del poblado chií de Sbuba, causando un número no especificado de heridos. La guerra en Siria ha causado una profunda división en el vecino Líbano, donde se ha recrudecido la violencia, especialmente desde que Hizbulá (chií) confirmó su apoyo al régimen del presidente Bashar al Asad en su guerra contra los rebeldes, encabezados por sunníes. Foto: Ahmad Shalha / Reuters


Saná, Yemen, 16/12/2013: Un niño, en un centro de salud de la capital yemení, durante la campaña de vacunación contra la polio que están llevando a cabo Unicef y la Organización Mundial de la Salud tras la detección de al menos 17 casos de esta enfermedad en Siria. La campaña tiene como objetivo vacunar a un total de 23 millones de niños en todo Oriente Medio. Foto: Mohammed Huwais / AFP


Ammán, Jordania, 18/12/2013: Refugiadas sirias, durante la representación de la obra Las troyanas de Siria, en la capital jordana. A lo largo de seis semanas, la actriz siria Nanda Mohammad ha dirigido a un grupo de refugiadas de su país en el montaje una versión de la tragedia de Eurípides Las troyanas, en el que se establecen paralelismos entre la forma en que fueron tratadas las mujeres de Troya tras la caída de esta ciudad, y el destino de las mujeres sirias víctimas de la violencia y la guerra. Foto: Muhammad Hamed / Reuters


Jerusalén, 19/12/2013: Un palestino, propietario de una tienda en la Ciudad Vieja, con un maniquí vestido de Papá Noel. Foto: Abir Sultan / EPA


Al Masara, Cisjordania (Palestina), 20/12/2013: Un niño vestido de Papá Noel sujeta una bandera palestina junto a un grupo de soldados israelíes, cerca de la ciudad de Belén, durante una protesta contra el muro israelí de separación en Cisjordania. Foto: Ammar Awad / Reuters


Belén, Cisjordania (Palestina), 18/12/2013. Un sacerdote camina entre las columnas de la Basílica de la Natividad. Esta semana se puso en marcha la primera restauración del templo en casi tres siglos. Las obras serán financiadas por la Autoridad Nacional Palestina y varios países, entre ellos España, que donará 100.000 euros. Foto: Ammar Awad / Reuters


Entre Najaf y Karbala, Irak, 18/12/2013: Peregrinos musulmanes chiíes reciben naranjas en su camino desde Najaf hasta la ciudad santa de Karbala, a donde se dirigen para participar en el festival religioso de Arba’in, que marca el cuadragésimo día después de la Ashura (la conmemoración del asesinato de Hussein, en el siglo VII). Foto: Mohammed Sawaf / AFP


Tel Aviv, Israel, 19/12/2013: Los cuidadores del zoo Ramat Gan Safari Park pensaban que esta pareja de pingüinos estaba formada por un macho y una hembra, pero, tras realizar una serie de test sanguíneos para unas pruebas de malaria, descubrieron que Suki y Chupchikoni son, en realidad, dos hembras. La pareja, conocida ya como «las pingüinas lesbianas», ha construido su propio hogar, recogiendo materiales para el nido. Foto: Haaretz


Doha, Catar, 17/12/2013: Como parte de las celebraciones de su fiesta nacional, Catar exhibió el miércoles una bandera gigantesca del país, que ha sido calificada ya por el Libro Guinnes de los Récords como la más grande del mundo. La bandera ocupó un área de casi 102.000 metros cuadrados, en una zona industrial del norte de la capital, Doha. Pesaba 9,9 toneladas y fue elaborada a partir de tres grandes piezas de tela. Una vez concluida la festividad, estaba previsto reciclarla en 200.000 mochilas para escolares de 60 países. Foto: AFP


El Cairo, Egipto, 17/12/2013: La Orquesta de la Ópera de El Cairo, durante su concierto de Navidad de este año. Compartieron el escenario con el coro Celebración de El Cairo y los solistas de la Compañía de Ópera de El Cairo. Foto: Sherif Sonbol / Al Ahram


Valle de Jule, Israel, 20/12/2013: Una bandada de grullas, en la reserva del Parque Natural y Ornitológico del Lago Jule (o Hula), en el norte de Israel. Este valle es una de las principales paradas en la ruta migratoria de cientos de especies de aves que cubren cada año el trayecto entre el hemisferio norte y el sur. Foto: Nir Elias / Reuters


Estambul, Turquía, 18/12/2013: Un grupo de derviches, durante una ceremonia en el centro Galata Mevlevîhânesi. Foto: Gurcan Ozturk / AFP


Altos del Golán, Siria, 17/12/2013: Un caballo sobre la nieve, al pie del Monte Hermon, cerca de la frontera sirio-israelí. Foto: Nir Elias / Reuters

Las fotos de la semana

Una selección de fotografías tomadas en Oriente Medio esta semana. Pincha en los enlaces de las localizaciones para ver las imágenes.

Imagen captada el 15 de diciembre por un satélite de la NASA en la que se aprecian las zonas donde más nieve se acumuló durante la tormenta de los días anteriores en Oriente Próximo, incluyendo Jerusalén y sus alrededores, Cisjordania y partes de Jordania, Líbano, Siria y la península del Sinaí, en Egipto. Foto: EOSDIS Worldview / NASA / GSFC

Oriente Próximo han vivido en estos últimos días un fenómeno poco habitual en el Levante mediterráneo: la nieve. La tormenta Alexa (el mayor temporal de nieve en la región desde 1953) ha dejado escenas pintorescas, como las ciudades de Jerusalén, El Cairo o Estambul cubiertas de blanco por primera vez en décadas, pero también ha golpeado toda la zona con extrema dureza, causando cortes de carreteras e interrupciones masivas en el suministro eléctrico. En miles de casas faltó la calefacción cuando más bajas eran las temperaturas, ciudades y pueblos enteros quedaron aislados, y escuelas y organismos públicos han permanecido cerrados durante días. En la Franja de Gaza, la zona que más ha sufrido los efectos del temporal, las lluvias torrenciales hicieron necesario evacuar a miles de personas. Y la situación de los más de dos millones de refugiados sirios que viven en los campos de acogida se hizo más dura aún si cabe.

El domingo, los colegios de todos los territorios palestinos se encontraban aún cerrados, y solo en Gaza 17 centros escolares habían tenido que ser habilitados como refugio. Otros cinco se encontraban totalmente inundados por el agua, según un informe de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), que llegó a elevar a 10.000 el número de desplazados por las inundaciones en la Franja.

El informe destacaba asimismo los graves efectos de la tormenta sobre los pastores de Cisjordania, una situación empeorada por las consecuencias de la política israelí en los territorios ocupados: «Varias comunidades de pastores habían visto como sus casas y cuadras fueron demolidas por las autoridades israelíes apenas un día antes de la llegada de la tormenta», explicaba la agencia.


Foto: Varias personas rescatadas este lunes por voluntarios de los servicios de emergencia, tras las inundaciones del fin de semana en Gaza (Mohammed Salem / Reuters)


Las pérdidas sufridas por los agricultores palestinos han sido también muy cuantiosas: «En Cisjordania los informes preliminares revelan daños en la cabaña de ganado de Hebrón Belén y Shalfit. Las comunidades beduinas y de pastores parecen ser las más afectadas. Los pastores podrían verse afectados por más muertes de ganado en las próximas semanas», señala la OCHA.

En Gaza, más del 10% de los invernaderos y campos han quedado destruidos o dañados por la tormenta, al igual que unas 50 explotaciones avícolas y ganaderas. Unos 12.000 pollos y 200 reses han muerto como consecuencia del temporal.


Foto: Cientos de vehículos bloqueados por la nieve en Jerusalén (Uriel Sinai)


Por su parte, la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos en Oriente Próximo (UNRWA) ha declarado «zona catastrófica» el norte de la Franja de Gaza debido a las inundaciones, y ha pedido el levantamiento del bloqueo israelí. «Un total de 4.000 trabajadores de la UNRWA combaten las inundaciones y han evacuado a cientos de familias hacia instalaciones de la UNRWA», señaló este sábado un portavoz del organismo, Chris Gunness, citado por la agencia de noticias palestina Ma’an.

«Una comunidad normal lucharía para recuperarse de este desastre, pero una comunidad que ha sufrido uno de los bloqueos más largos de la historia humana, cuyo sistema de sanidad pública ha sido destruido y en la que el riesgo de enfermedades era ya de por sí alto, debe quedar liberada de estas restricciones impuestas por hombres para afrontar el impacto de una catástrofe natural como esta», añadió Gunness.


Fotogalerías de la nieve en Oriente Próximo:
» Al Jazeera
» Reuters
» The Washington Post
» Ma’an
» The Baltimore Sun

Más información y fuentes:
» Storm disaster in Gaza “man-made” (Ma’an)
» Winter storm “Alexa” chills the Middle East (Reuters)
» La ONU eleva a 10.000 el número de desplazados por las inundaciones en la Franja de Gaza (Europa Press)

Un invierno inusualmente duro azota Oriente Próximo

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Mohamed Asaf, con una bandera palestina, en la final del concurso televisivo ‘Arab Idol’. Imagen: Arab Idol / MBC

Lo consiguió. El joven cantante palestino de 23 años Mohamed Asaf, nacido en una familia de refugiados de Gaza, es ya el flamante nuevo ganador del concurso televisivo de talentos más famoso del mundo árabe, Arab Idol. Y miles de palestinos, tanto de Gaza como de Cisjordania, se han echado a la calle para celebrarlo; se han echado a la calle, por una vez, con alegría.

En la Franja, tanto en Ciudad de Gaza como a lo largo de toda la costa, decenas de miles de personas cantaban, bailaban y vitoreaban el nombre de Asaf este sábado por la noche, a pesar de las críticas negativas que han vertido sobre el programa durante estos últimos meses tanto los sectores sociales más conservadores como miembros de Hamás, el partido-milicia islamista gobernante en el territorio. Según informa AFP, al anochecer no quedaba libre ni una sola plaza en hoteles, restaurantes y cafés, donde los espectadores se agolpaban para seguir por televisión la final de Arab Idol.

También ha habido fiesta y celebraciones en Ramala, donde la multitud se reunió cerca de la tumba del líder histórico palestino, Yasir Arafat, y en las principales ciudades de Cisjordania.

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Celebración en Gaza de la victoria del cantante palestino Mohamed Asaf en el concurso televisivo panárabe Arab Idol. Fotos: Mohammed Abed / AFP / Getty Images

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina (UNRWA) ya ha anunciado que nombrará a Asaf Joven Embajador de este organismo ante la ONU. La decisión se tomó hace unos días, según informa la agencia de noticias palestina Ma’an, pero se ha filtrado después de que Asaf lograra la victoria en el concurso, algo que ningún palestino había conseguido hasta ahora. «Por fin, una fantástica historia de Gaza que tocará los corazones de todo el mundo. Es un día maravilloso para Palestina y para la ONU», dijo a Ma’an un diplomático en Beirut, la capital libanesa, donde se graba el programa.

La noche del viernes, en una de las últimas fases de la final, Asaf consiguió emocionar a sus seguidores y al jurado del programa al interpretar una famosa canción nacionalista palestina, Levanta el kefiye (el pañuelo tradicional palestino a cuadros blancos y negros). Muchos pensaron entonces que la victoria ya era suya, y no se equivocaron.


Más información y fuentes:
» Gaza joy as Palestinian singer wins Arab Idol contest (AFP)
» Palestinian ‘Arab Idol’ victory unleashes rare outburst of joy (Reuters)
» Arab Idol winner Assaf named 1st Palestinian UN ambassador (Ma’an)
» Palestinian wins Arab Idol for first time (Al Jazeera)

Leer también:
» El joven cantante que une a los palestinos y desata pasiones

Mohamed Asaf da una noche de alegría a los palestinos

Lo consiguió. El joven cantante palestino de 23 años Mohamed Asaf, nacido en una familia de refugiados de Gaza, es ya el flamante nuevo ganador del concurso televisivo de talentos más famoso del mundo árabe, Arab Idol. Y miles de… Leer

Mohamed Asaf, en el programa ‘Arab Idol’. Imagen: MBC

Su nombre saltó hace solo unas semanas a los medios de comunicación occidentales, pero en todo el mundo árabe hace meses que es un auténtico ídolo. Mohamed Asaf, el joven cantante palestino de 23 años que va camino de convertirse (con permiso de sus rivales) en el nuevo ganador del concurso televisivo Arab Idol (una especie de Operación Triunfo árabe con el formato de programas como X Factor o American Idol, y tan hortera y al mismo tiempo emotivo como éstos), es ya mucho más que una cara bonita con una extraordinaria voz.

Miles de personas siguen cada fin de semana sus actuaciones por televisión (el programa se emite desde Beirut), y su imagen (moderna, impecable, simpática) rompe estereotipos. Pero lo más notorio es que el joven ha logrado unir, aunque solo sea en el apoyo incondicional que le brindan y el entusiasmo con que le siguen, a los palestinos de Cisjordania y Gaza. Casi un caso, valga la expresión, de panarabismo real. El siguiente vídeo lo grabó el fin de semana pasado en Ramala (Cisjordania) la cadena de televisión palestina Al Watan, durante una de las interpretaciones de Asaf en la fase final del concurso:

Su historia es bien conocida. Asaf es un refugiado palestino, procedente del campo de Jan Yunis, en Gaza. No tiene una formación artística profesional, pero ha cantado desde que era un niño, cuando actuaba en bodas y fiestas familiares. Su repertorio está lleno de canciones patrióticas con referencias al sufrimiento del pueblo palestino bajo la ocupación israelí, aunque Asaf interpreta también canciones de amor y temas tradicionales.

Según contó él mismo hace uno año, las autoridades de Hamás (el grupo radical islámico que gobierna en Gaza) le han llegado a arrestar hasta una veintena de veces: «En una ocasión me detuvieron durante una semana. Me pedían que firmara un compromiso para no seguir cantando, pero, como palestino, mi mensaje es que nosotros no solo hablamos y luchamos, también cantamos». Lo cierto es que la estricta interpretación de la ley coránica que trata de imponer Hamás en la Franja parece haber perdido estos días la batalla contra el fervor que suscita el cantante.

Y si la presión integrista no consiguió apartarle de su deseo de cantar, la fama tampoco le ha alejado de sus convicciones. Según publicó el diario The Guardian, Asaf se ha manifestado en varias ocasiones contra la ocupación israelí y en apoyo de las huelgas de hambre de los presos palestinos encerrados en cárceles israelíes: «Si tuviera que elegir entre ganar Arab Idol y la libertad de [el prisionero] Samer Issawi, elegiría la libertad para este héroe palestino, cuya firmeza es incomparable», dijo el joven hace un par de meses a la página web palestina de noticias Ma’an.

En la edición de Arab Idol este año participan cantantes procedentes de Túnez, Siria, Irak, Líbano, Palestina, Arabia Saudí y Egipto. Todos se disputan el favor de un público que, a golpe de SMS, decreta el éxito o la derrota de los competidores. Los palestinos se han movilizado a través de las redes sociales para votar por Asaf, y una empresa privada lanzó una campaña para promocionarle colgando carteles en las calles de Gaza y Cisjordania.

«Asaf lucha por los colores de Gaza y de Palestina. Le apoyo y me siento orgullosa de él», contaba en Gaza una joven palestina a la agencia AFP. «Asaf ha superado el bloqueo y las restricciones sociales. Gaza no es solo terrorismo, muerte y violencia, también hay artistas que necesitan descubrir sus habilidades y un poco de libertad para ello», añadía su madre.

En el mismo reportaje de AFP, el padre del cantante, Jaber, no ocultaba su orgullo: «Su talento es extraordinario, nadie puede detenerlo. Hace sonreír a la gente y les ha unido, a pesar de la división».


Más información y fuentes:
» Gaza refugee tipped to win Arab Idol (The Guardian)
» Mohammed Assaf, singing sensation out of Gaza refugee camp, torches Arab Idol competition (Mondoweiss)
» Palestinians unite behind Gaza Strip “Arab Idol” star (Reuters)
» El héroe de la canción protesta palestina (El Mundo, AFP)
» ‘Arab Idol’s’ first contestant from Gaza grabs spotlight (CNN)
» The Next Arab Idol: Palestine’s Boy Wonder and Stereotype Buster (The Daily Beast)
» Palestinian Arab Idol finalist says Issawi an inspiration (Ma’an)
» Mohammed Assaf (Wikipedia)

El joven cantante que une a los palestinos y desata pasiones

Su nombre saltó hace solo unas semanas a los medios de comunicación occidentales, pero en todo el mundo árabe hace meses que es un auténtico ídolo. Mohamed Asaf, el joven cantante palestino de 23 años que va camino de convertirse… Leer

Una selección de fotografías tomadas en Oriente Medio esta semana. Pincha en los enlaces de las localizaciones para ver las imágenes.


Belén, Cisjordania (Palestina), 21/4/2013: Medio millar de corredores, la mitad palestinos y el resto, extranjeros, participaron este domingo en Belén en el primer maratón de Cisjordania. En la carrera, denominada «Maratón por el Derecho al Movimiento Palestino», no hubo deportistas de Gaza por prohibición de Israel. La prueba discurrió junto al muro de separación levantado por el Gobierno israelí. Ganó Abdel Nasar Awajneh, con un tiempo de 3 horas, 9 minutos. Foto: Mahmoud Illean / AP. Más fotos, aquí y aquí.


El Cairo, Egipto, 19/4/2013: Un centenar de personas resultaron heridas el viernes en torno a las plazas Tahrir y de Abdelmoneim Riad, en una batalla campal entre partidarios y opositores de los Hermanos Musulmanes, que se enfrentaron durante una manifestación convocada por la cofradía islámica frente a la sede del Tribunal Supremo. Foto: Mohamed El-Shahed / AFP


Manama, Bahréin, 15/4/2013: El Gran Premio de Fórmula 1 de Bahréin se celebró finalmente sin incidentes este fin de semana, al menos dentro del circuito. Fuera, los manifestantes contra el Gobierno (la mayoría, chiíes) cortaron en la madrugada del domingo varias carreteras y protagonizaron enfrentamientos con la policía, que lanzó gases lacrimógenos. Según denuncia Amnistía Internacional, dos años después del inicio de las protestas populares de 2011, los presos de conciencia continúan en prisión y se sigue encarcelando a los activistas solo por expresar sus opiniones en las redes sociales o en marchas pacíficas. En la imagen, manifestantes exigen el boicot a la prueba. Foto: Mohammed Al-Shaikh / AFP


Deir Al Zor, Siria, 17/4/2013: Combatientes del Ejército Libre Sirio toman posiciones durante un enfrentamiento con tropas gubernamentales. El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, anunció esta semana que Washington ofrecerá a las fuerzas de oposición sirias 123 millones de dólares más en concepto de «ayuda no letal». Por otra parte, el jefe de la oposición siria, Ahmed Moaz al Jatib, dejó definitivamente su cargo, alegando la «falta de acción» de la comunidad internacional ante el conflicto en Siria. Foto: Khalil Ashawi / Reuters


Alepo, Siria, 16/4/2013: Una familia huye con sus pertenencias de los combates en la ciudad. Naciones Unidas ha aumentado dramáticamente sus cálculos sobre el total de personas desplazadas dentro de Siria y necesitadas de ayuda internacional de extrema urgencia, que ahora sitúa en unos cuatro millones. Foto: Dimitar Dilkoff / AFP


Zarqa, Jordania, 15/4/2013: Un niño refugiado sirio juega con juguetes donados por la Media Luna Roja de los Emiratos Árabes Unidos, en el nuevo campo de refugiados de Mrigb al-Fuhud. El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, visitó este domingo el otro campo de refugiados en Jordania, el de Zaatari, el más grande de la región. Los exiliados le trasladaron la sensación de haber sido «abandonados» por la comunidad internacional. Foto: AFP


Basora, Irak, 20/4/2013: Un hombre vota en un colegio electoral acompañado por sus hijas, durante las elecciones provinciales que comenzaron este sábado. Son los primeros comicios desde la retirada del país de las tropas estadounidenses, y en juego están 450 escaños para los que compiten más de 8.100 candidatos pertenecientes a 256 entidades políticas. Las elecciones se iniciaron marcadas por los asesinatos en los últimos dos meses de al menos 13 candidatos, todos ellos suníes, en ataques que podrían haber sido perpetrados, como sospechan familiares y compañeros de los fallecidos, por orden de sus rivales políticos. Foto: Atef Hassan / Reuters


Kirkuk, Irak, 15/4/2013: Un policía inspecciona los restos de un coche bomba tras uno de los varios atentados que han sacudido el país esta semana, en vísperas de las elecciones provinciales. El jueves, una bomba en el interior de un edificio de Bagdad que alberga un restaurante, una cafetería y un salón de juegos dejó al menos 30 muertos y 65 heridos. Foto: Reuters


El Cairo, Egipto, 15/4/2013: El expresidente egipcio Hosni Mubarak, junto a sus hijos Gamal (izquierda) y Alaa, en las dependencias de la Academia de Policía de la capital del país. Un tribunal dictó el lunes su puesta en libertad provisional en la causa que se sigue contra él por la muerte de manifestantes, si bien continuará detenido por los casos de corrupción. Foto: Reuters


Ciudad de Kuwait, Kuwait, 15/4/2013: Miles de personas protestaron por la condena a cinco años de prisión del líder opositor Mussallam Al Barrak, sentenciado por insultar al emir, Sabah Al Ahmad Al Sabah. En un discurso ante miles de manifestantes frente al edificio del Parlamento en octubre pasado, Al Barrak dijo que no iban a permitir al emir llevar a Kuwait hacia «el abismo de la autocracia». Foto: Yasser Al-Zayyat / AFP


Jerusalén, 17/4/2013: Dos niños miran un póster con los nombres de un centenar de palestinos de Jerusalén que permanecen detenidos en cárceles israelíes, durante una manifestación en demanda de su liberación. Reos palestinos de la cárcel israelí de Hadarim anunciaron este miércoles una huelga de hambre en solidaridad con Samer al Issawi, quien a su vez lleva más de siete meses en huelga de hambre en protesta por su detención. Al Issawi forma parte del grupo de 1.027 prisioneros palestinos que fueron liberados por Israel en 2011 a cambio de la entrega del soldado Gilad Shalit. Sin embargo, Al Issawi fue arrestado de nuevo posteriormente, al igual que otros trece palestinos. Foto: Jim Hollander / EPA


Ciudad de Gaza, Gaza (Palestina), 16/4/2013: Muñecos ahorcados representando palestinos presos, en la prisión de Saraya, usada antiguamente por las fuerzas de seguridad israelíes y ahora un centro conmemorativo. Foto: Ali Ali / EPA


Latrun, Israel, 15/4/2013: Una rosa, en un muro con los nombres inscritos de soldados israelíes muertos, en el día dedicado a recordar a las víctimas israelíes de las guerras y el terrorismo. Foto: Ariel Schalit / AP


Teherán, Irán, 18/4/2013: Soldados iraníes con uniformes de camuflaje durante un desfile militar con motivo del Día del Ejército. El régimen iraní dio a conocer toda una serie de equipos militares, incluyendo un avión no tripulado de reconocimiento, dos sistemas de lanzamiento de cohetes y un sistema móvil de intercepción de misiles. El martes, Irán anunció haber probado con éxito un misil de medio alcance tierra-mar en el Golfo Pérsico. En un ambiente de tensiones en la región y de concentración de fuerzas navales de EE.UU. y sus aliados en la zona, Irán lleva a cabo constantes pruebas de misiles como parte de sus ejercicios militares. Foto: Behrouz Mehri / AFP


Sana, Yemen, 17/4/2013: Un chico conduce su bicicleta en una calle inundada por una avería. Foto: Khaled Abdullah / Reuters


Nicosia, Chipre, 20/4/2013: Un soldado de la ONU, frente a un avión destrozado en el aeropuerto abandonado de la capital chipriota. El aeropuerto está cerrado al uso desde la guerra de 1974 y se encuentra tal y como quedó tras los combates. Su custodia está a cargo de la UNFICYP (Fuerza de las Naciones Unidas para el Mantenimiento de la Paz en Chipre). Foto: Petros Karadjias / AP


Dubái, Emiratos Árabes Unidos, 16/4/2013: Un deportivo Lamborghini Aventador, modificado especialmente como coche policial. La policía de Dubái ha introducido este modelo, que puede alcanzar hasta 349 km/h, para patrullar en las autopistas del emirato. Foto: Karim Sahib


Ciudad Sadat, Egipto, 17/4/2013: Un horno de fundición en una fábrica perteneciente a la compañía Ezz Steel, la mayor productora de acero de Egipto. La empresa anunció esta semana que espera aumentar sus beneficios en 2014, gracias a una nueva factoría en la que podrá ahorrar entre 50 y 100 dólares por cada tonelada de hierro producida. Foto: Amr Abdallah Dalsh / Reuters


El Cairo, Egipto, 19/4/2013: Un artista realiza un número con fuego durante una fiesta de despedida de soltero. Foto: Eman Helal / AP


Ankara, Turquía: Un conductor confundió una entrada del metro con un aparcamiento subterráneo. No hubo heridos. Foto: Hürriyet


El Cairo, Egipto, abril 2013: El centro de la capital egipcia acoge a lo largo de todo este mes un Festival de Arte Contemporáneo (D-CAF, por sus siglas en inglés), que incluye teatro, música, cine, talleres y arte digital, con artistas tanto egipcios como extranjeros, y actuaciones en salas y al aire libre. En la imagen, un momento de la representación de la obra Vuelta al frente. Foto: Bassam Al-Zoghby / Al Ahram. Más fotos, aquí.


Estambul, Turquía, 20/2/2013: Una actuación durante el primer Festival de Cultura Rusa, celebrado esta semana en la ciudad turca. Foto: Ahmet Dumanli / Hürriyet


Gaza, Palestina, 19/4/2013: Un joven vende maíz en un puesto en la playa. Foto: Ali Ali / EPA

Las fotos de la semana

Una selección de fotografías tomadas en Oriente Medio esta semana. Pincha en los enlaces de las localizaciones para ver las imágenes.

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